El gobierno de la familia Al Assad, que gobernó el país árabe desde 1971, colapsó a manos de los insurgentes liderados por el islamista Organismo de Liberación del Levante, que tomaron Damasco sin apenas resistencia tras 12 días de ofensiva.
El desprecio por Bashar Al Assad en Siria. Foto: Reuters.
En tan solo doce días, el grupo insurgente denominado Organismo de Liberación del Levante, llevó a cabo una ofensiva que acabó con 53 años de poder canalizado en una sola familia, al derrocar al expresidente sirio, Bashar Al Assad. Este episodio marcó la culminación de una rebelión de casi 14 años y un momento clave en una guerra civil que mató a cientos de miles de personas y desplazó a la mitad de la población.
Siria viene sufriendo la violencia protagonizada por el régimen recientemente depuesto que, desde el comienzo del conflicto en 2011, convirtió a la prisión en el destino final tanto de opositores pacíficos a las autoridades como de militares sospechosos de oponerse al gobierno.
Combatientes rebeldes derrocaron a Bashar Al Assad en Siria. Foto: Reuters.
Todo comenzó el 15 mayo de 2011 cuando, en el marco de la llamada “primavera árabe”, estallaron protestas contra Bashar Al Assad, bajo el lema “Una Siria sin tiranía”. A partir de ese momento, el país ubicado en Medio Oriente se sumió en una guerra civil.
El expresidente sirio, que llegó al poder luego de que de la muerte de su hermano mayor en un accidente de tráfico lo posicionara como el heredero a la presidencia, se embarcó en una lucha contra los grupos insurgentes del país. Incluso, en 2014, el Estado Islámico proclamó su califato y durante años logró apoderarse de vastas secciones de Siria e Irak.
La aparición del este grupo cambió el curso de la guerra en Siria y motivó la formación de una coalición liderada por Estados Unidos que incluía a más de 70 naciones para derrotarlo. En 2019, esa alianza finalmente expulsó al movimiento terrorista paramilitar insurgente de su último refugio en Siria.
Te puede interesar:
EEUU retirará soldados de Siria pero advirtió que "seguirá preparado para continuar los ataques contra el Estado Islámico"
Desde 2019 hasta finales del pasado mes de noviembre Bashar Al Assad parecía tener la situación bajo control, luego de la expulsión del Estado Islámico de Siria. Sin embargo, el 27 noviembre de 2024 una coalición insurgente liderada por el Organismo de Liberación del Levante, apoyada por Turquía, inició una ofensiva contra el Gobierno.
Menos de dos semanas después, el 8 diciembre de 2024, los insurgentes proclamaron su victoria e informaron de la huida de Bashar Al Assad de Damasco. Así, los rebeldes declararon “liberada” la capital de Siria tras entrar en la ciudad con muy poca resistencia por parte de las fuerzas del régimen.
Festejo por la caída de Bashar Al Assad. Foto: Reuters.
Instantáneamente, se comenzaron a oír disparos de celebración y una horda de gente salió a las calles de todo el país para festejar lo que sería el final de un período marcado por la devastación.
Te puede interesar:
Jorge Castro en Canal 26: la Cámara de Representantes de EEUU aprobó el plan de financiamiento económico
El derrocamiento del gobierno en Siria sorprendió a propios y extraños por la rapidez con la que se lo llevó a cabo. Sin embargo, cuando se husmea un poco en algunos detalles clave, las respuestas aparecen instantáneamente.
Iniciando, la situación geopolítica es fundamental. Los aliados del régimen, Rusia e Irán, estaban enredados en sus propios conflictos: el primero en Ucrania, y el segundo en el Líbano, a través de Hezbollah, muy debilitada tras la muerte de sus principales líderes en los ataques israelíes.
La guerra que Rusia mantiene con Ucrania le imposibilitó defender a Al Assad. Foto: Reuters.
Además, el hundimiento financiero del Líbano había erosionado la riqueza de las élites sirias, que normalmente tenían su dinero allí. En cuanto al ejército, estaba formado por reclutas poco entusiastas y en los que el gobierno no confiaba.
Ante este panorama, las facciones rebeldes aprovecharon la ocasión y, en una rápida sucesión de avances, se apoderaron de Damasco. Tan sencillo como se lo cuenta, los insurgentes acabaron con 53 años de dictadura y abrieron un nuevo periodo para la historia de Siria, un país castigado por la guerra.
1
¿Se muda Mercado Libre?: Marcos Galperín se suma al éxodo de Delaware y busca relocalizarse en Texas
2
Una reconocida cadena de comida rápida cierra 200 locales: qué pasará con sus productos
3
Tratado de Defensa Mutua: Corea del Norte admite haber enviado soldados a luchar en la guerra de Ucrania
4
Por riesgo de crimen, secuestro y terrorismo: EE.UU. señaló a un país de Sudamérica como peligroso para viajar
5
Donald Trump dijo que él sería un gran papa y reveló quién es su candidato favorito para suceder a Francisco