Día de la Ciberseguridad: los 7 errores más comunes en el cuidado de información virtual y cómo evitarlos

Ciberseguridad. Foto: Unsplash

En el último tiempo, las tecnologías aumentaron su influencia en la vida de las personas. Incluso, un estudio indica que pasan se pasaba un promedio de 5 horas diarias mirando las pantallas. Tanta exposición a ellas nos pone en peligro de ser víctimas de ciberataques y robo de información, por lo que una serie de tips podría ser la clave para evitarlo.

Los pequeños dispositivos nos acompañan a todos lados y en los últimos años se volvieron mucho más que un aparato para hacer llamadas y enviar mensajes. Los celulares se volvieron el centro de manejo de nuestras cuentas bancarias, turnos médicos e información de suma importancia.

Al guardar tantos datos personales, un simple click en la página incorrecta podría quebrar nuestra ciberseguridad y volvernos víctimas de robos y hackeos. Muchas personas ignoran el riesgo que se exponen al registrarse en ciertas plataformas, a pesar de las múltiples campañas de concientización que existen.

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En este sentido, un relevamiento realizado por los especialistas en seguridad informática de ESET reveló que el error humano es responsable de aproximadamente el 82% de todas las filtraciones de datos corporativos.

Para evitar que continúen los ciberataques es mejor el manejo de los dispositivos y que las personas tomen más conciencia sobre su uso.

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Los 7 errores de ciberseguridad más comunes

Esta lista de las equivocaciones más comunes fue creada por los expertos en seguridad informática de ESET y son las siguientes:

• Abrir enlaces y archivos no solicitados: También conocido como “Phishing”, es cuando nos contactan de cuentas falsas para robarnos información a través de WhatsApp o correo electrónico. Al ingresar a los enlaces y archivos automáticamente se descargan virus maliciosos en los dispositivos y se roban información personal, mayormente datos financieros.

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Para evitar este tipo de hackeos es importante asegurarse de donde viene el enlace y no abrirlo si dudamos del remitente, a quien podemos contactar para asegurarnos su legitimidad.

• Omitir actualizaciones: Para garantizar mayor seguridad en los aparatos tecnológicos, mantener al día las licencias de parches protectores es clave, ya que un pequeño descuido podría dar lugar al ciberataque.

Para evitar esta amenaza hay que tener activas las actualizaciones automáticas en nuestro sistema operativo, así no es necesario hacerlo manualmente y no se corre el riesgo de cometer errores.

• Conectar dispositivos USB desconocidos: A pesar de que las plataformas de almacenamiento se volvieron muy populares, guardar información en un dispositivo que se enchufa a los computadores todavía es posible y es a través de ellos que se puede inyectar un virus malicioso que roba información.

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Para que esto no pase nunca hay que conectar la memoria o aparato USB de ninguna persona a nuestros equipos, ya que no sabemos su contenido y nos exponemos a un gran riesgo.

• Usar o reutilizar contraseñas débiles: Este es uno de los errores más comunes, según los expertos, ya que son claves fáciles de adivinar y vuelven a las personas más propensas a los ataques, ya que solo con el nombre de usuario y adivinar la contraseña, tienen accesos a toda la información.

Evitar este error es muy simple, hay que elegir contraseñas largas que tengan mayúsculas y números y que sean únicas.

• No activar la autenticación en dos pasos: Esta práctica se está volviendo muy común en las plataformas y redes sociales para garantizar la seguridad de los usuarios. Consiste en recibir una clave especial de la aplicación para tener acceso. Esta alternativa de seguridad también puede dar acceso a través del escaneo facial y así evitar los ciberataques. Funciona como una capa extra de la contraseña.

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• No hacer copias de seguridad: Realizar estas copias es un hábito de seguridad básico para proteger nuestra información. Deben realizarse regularmente y guardarse sin conexión a internet para garantizar su protección de los hackeos.
  
  
• Usar dispositivos de trabajo para uso personal: Otro error muy común al que muchos se ven tentados. Sin embargo, esta acción pone en riesgo a los usuarios, ya que podrían infectar no solo sus redes personales, sino también las corporativas por un mal manejo y poner en riesgo sus trabajos.

Para evitar este gran error, los expertos recomiendan no usar los aparatos laborales para tareas personales, solo con fines de trabajo.