Cuál es la edad en la que se deja de ser feliz y cuándo vuelve el disfrute, según la ciencia

Los estados de ánimo cambian a lo largo de la vida y es posible tener dos sentimientos encontrados a la vez.
Cuándo disminuye la felicidad.
Cuándo disminuye la felicidad. Foto: Pexels

Un estudio científico confirmó lo que todos sospechábamos: la curva de la felicidad comienza a descender hasta llegar a su nivel más bajo en cierta edad, pero también señala que, pasada esa caída, comienza a aumentar nuevamente y se puede llegar a la plenitud.

Los estados de ánimo cambian a lo largo de la vida y es posible tener dos sentimientos encontrados a la vez, pero una investigación descubrió que hay un patrón claro en la forma en la que varía la satisfacción personal y la felicidad con el pasar de los años.

A los 18 comienza a disminuir la felicidad. Foto: Pexels

El relevamiento realizado por el economista David Blanchflower, en colaboración con el National Bureau of Economic Research, reveló que la felicidad no sigue una línea ascendente o descendente continua, sino una curva en forma de U.

Este análisis fue realizado en 130 países, monitoreando a personas de distintas edades y confirmó que el bienestar comienza a descender a partir de los 18 años, coincidiendo con la transición de la adolescencia a la adultez. El punto más bajo se alcanza hacia los 47 años, para luego recuperarse y volver a crecer alrededor de los 50.

Estrés laboral. Foto: Unsplash.
Los 47 años son un momento clave en la vida de todo ser humano.

Por qué la felicidad disminuye a partir de los 18 años: la ciencia lo explica

Según el estudio citado, la explicación se entra en los cambios que acompañan al hombre en el paso a una adultez plena. De hecho, a partir de los 30 años, y con mayor fuerza alrededor de los 40, muchas personas comienzan a enfrentar lo que sería “la peor etapa de su vida”, ya que está plagada de responsabilidades, decisiones a largo plazo y autoexigencia.

Este proceso hace que el optimismo propio de la juventud se desgaste gradualmente. Se pierde espontaneidad, y las presiones sociales (sobre todo en las mujeres), laborales y familiares comienzan a pesar más. La satisfacción personal, en consecuencia, disminuye.

Cansancio y trabajo. Foto: Alamy
El cansancio es una de las características principales del estrés.

Por otro lado, el estudio indica que el momento más crítico de esta curva ocurre a los 47 años, edad en la que la felicidad alcanza su punto más bajo. Se trata de lo que comúnmente se conoce como la crisis de la mediana edad, caracterizada por la incertidumbre, la ansiedad y los cuestionamientos internos.

En esta etapa, muchas personas sienten la presión de tener que equilibrar su vida personal con la familiar, ya que comienzan a percibir mayor claridad en sus cambios físicos y emocionales. Sin embargo, el alivio llega al cumplir los 50, ya que la curva de la felicidad comienza a elevarse nuevamente.

Este cambio se explica por la madurez emocional y la capacidad de aceptar los propios límites, dejando atrás la presión de perseguir ideales inalcanzables. Aprender a disfrutar del presente y priorizar el tiempo de calidad se vuelve clave para una vida más plena.