Argentina declara a la obesidad como un factor de riesgo cada vez mayor ante el Covid-19 .
La mesa de los argentinos cada vez más en la mira.
Si nos hacemos la siguiente pregunta: como comen las argentinas la respuesta es simple y clara: Definitivamente MAL y únicamente no comen mal por elección sino por falta de recursos económicos.
Bajo el estudio bautizado “Proyecto Czekalinski” investigadores del Conicet intentaron durante seis meses alimentarse con los productos que tiene la canasta básica ( ricos en hidratos de carbono) la cual puede cubrir los requerimientos nutricionales de energía pero no de nutrientes que es lo que hace a la salud integral de una persona.
Muchos de los voluntarios (acostumbrados a una alimentación completa y balanceada) tuvieron que abandonar el proyecto debido a las consecuencias que sufrieron sobre su salud.
El estudio doble ciego implico dividir a los voluntarios en 3 grupos, a los cuales se les realizo un laboratorio previo para medir valores nutricionales.
Grupo uno: alimentación con los alimentos de la canasta básica
Grupo dos: alimentación basada en las guías alimentarias
Grupo tres: alimentación sin modificar sus hábitos
Algunas de las consecuencias más allá de la privación del derecho a poder elegir que comer (porque la alimentación variada, equilibrada y completa es un derecho); el impacto sobre la salud de la falta de macronutrientes y micronutrientes fueron:
Irritabilidad
Mareos
Dolor de cabeza
Desmayos
Aumento de los triglicéridos
Pérdida de peso ( grasa y musculo)
Alteración en el ciclo menstrual
La diferencia está en que no es lo mismo alimentarse y calmar el hambre que nutrirse.Cantidad, calidad, armonía y adecuación es algo que solo el 11 % de la población argentina puede cumplir.
El resto de la población argentina tiene una escases en el consumo de proteínas (carnes y lácteos), de vitaminas y minerales (frutas y verduras), una gran carencia en el consumo de fibra y un exceso de hidratos de carbono blancos que solo permiten cubrir el valor calórico total (energía) a través de refinados y ultra procesados que lejos están de ser saludable y cumplir la función real de alimento.
El resultado: malnutrición, obesidad y diabetes, siendo la obesidad hoy una de las responsables de mayor causante de muerte a nivel mundial y hoy en nuestro país la complicación más grande de la pandemia en los infectados por el virus de covid19.
En nuestro país según la encuesta de factores de riesgo el 36 % de los argentinos mayores de 18 años posee obesidad.
Un IMC mayor a 30 puntos es considerado obesos; agravando el cuadro de mortalidad por covid19.
Tete Cóccaro - Lic. en Nutrición M.N 5705 - IG @coccaro.nutricion
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