Los perros también sufren el frío: qué razas requieren mayor protección durante las bajas temperaturas

Con la llegada del invierno, las bajas temperaturas no solo afectan a las personas, sino también a los animales. En particular, algunos perros presentan una mayor vulnerabilidad al frío, debido a su complexión física, tipo de pelaje o estado general de salud.
Según veterinarios y expertos en conducta animal, el pensamiento generalizado de que todos los perros toleran bien el invierno por su pelaje puede inducir a errores que comprometen su bienestar.

Perros y bajas temperaturas: cuáles son las razas que requieren abrigo extra durante el invierno
Las razas de menor tamaño, como los chihuahuas o los pinschers miniatura, encabezan la lista de los más sensibles. Su escasa masa corporal y la falta de subpelo hacen que pierdan calor con rapidez, lo que se traduce en temblores, incomodidad o incluso problemas respiratorios si no se los protege adecuadamente.
A estos se suman otras razas de pelo corto como los galgos, los dóberman o los bóxer, que, a pesar de su mayor tamaño, también carecen del aislamiento natural suficiente para resistir temperaturas extremas.
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Guía para el invierno: cómo cuidar a los perros más sensibles al frío. Foto: Unsplash.
Además de las características físicas, la edad es otro factor determinante en la capacidad de adaptación al frío. Los cachorros, cuyo sistema inmunológico aún está en desarrollo, y los perros mayores, propensos a enfermedades articulares como la artrosis, requieren una atención especial.
En estos casos, el frío puede agravar dolencias preexistentes o provocar nuevas afecciones si no se toman medidas preventivas.
Cómo proteger a los perros del frío, según expertos
Los expertos recomiendan, entre otras acciones:
- Limitar las salidas durante los días más fríos.
- Evitar los paseos en horarios de menor temperatura.
- Optar por caminatas cuando el sol esté presente.
- Utilizar ropa térmica para mascotas, como sweaters o camperas especiales, que ayuden a conservar el calor corporal.
- Dentro del hogar, se sugiere acondicionar el espacio con camas aisladas del suelo y alejadas de corrientes de aire.
- Sumar mantas y superficies térmicas que proporcionan un descanso confortable.

Guía para el invierno: cómo cuidar a los perros más sensibles al frío. Foto: Unsplash.
Una dieta equilibrada y adaptada al invierno también contribuye a mantener la salud del animal. En algunos casos, los veterinarios pueden recomendar ajustes en la alimentación para reforzar el sistema inmune y compensar el mayor gasto energético.
En síntesis, el frío no afecta por igual a todos los perros. Identificar las necesidades particulares de cada raza y etapa de vida es fundamental para atravesar el invierno sin contratiempos y garantizar que nuestros compañeros de cuatro patas permanezcan saludables y confortables durante toda la temporada.