Cada dos minutos muere una mujer por cáncer de cuello de útero: las claves para prevenirlo y salvar miles de vidas

La prevención a través de la vacunación contra el HPV y los chequeos anuales son cruciales para la prevención y la detección temprana. Qué dicen los expertos.

Cáncer de cuello de útero
Cáncer de cuello de útero Foto: Freepik

El cáncer de cuello de útero es el tercer diagnóstico más común entre las mujeres en la Argentina y uno de los principales desafíos de la salud pública. La prevención contra el VPH, los chequeos anuales y la detección temprana, son sólo algunas de las herramientas fundamentales para reducir el impacto de este tipo de enfermedades y salvar millones de vidas.

En este marco, durante el Mes de Acción para la Eliminación del Cáncer de Cuello Uterino, se realizó el encuentro “Del Diálogo A La Acción: Desafíos del Cáncer Femenino en Argentina”, destacando la importancia de políticas inclusivas, educación y acceso equitativo a tratamientos para reducir la mortalidad por esta enfermedad.

Cáncer de cuello de útero Foto: Freepik

A nivel global, también representa una de las mayores amenazas para la salud femenina y, de hecho, según la Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en Argentina se registran más de 4.600 diagnósticos cada año y cerca de 2.500 muertes por esta enfermedad, lo que la ubica como el tercer cáncer más frecuente en mujeres.

Mediante un informe publicado por el Economist Impact y respaldado por el MSD, se evidenció que la prevalencia en Argentina de este tipo de cáncer es significativamente más alta que el promedio regional, siendo las desigualdades socioeconómicas y geográficas las que más impactan de forma directa o indirecta en la mortalidad y el acceso a los tratamientos adecuados.

El Virus del Papiloma Humano (VPH) es responsable del 99% de los casos de cáncer cervicouterino. Se trata de un virus tan común que se estima que el 80% de las personas lo contraerá en algún momento de su vida.

Al respecto, la directora de Oncología de MDS Argentina, Gabriela Bugarín (MN 71988) remarcó a Canal 26 que: “Concientizar sobre el VPH tanto en mujeres como en hombres es clave para la prevención de diversos tipos de cáncer. Toda la comunidad debe contar con recursos educativos para priorizar la salud y romper con los mitos.”

Útero. Fuente: Unsplash
Útero. Fuente: Unsplash

Los controles ginecológicos periódicos son esenciales: el Papanicolaou y el test de VPH ofrecen una ventaja significativa al detectar lesiones precancerosas. Entre las recomendaciones más importantes:

  • Completar el esquema de vacunación contra el VPH.
  • Realizar exámenes ginecológicos y pruebas de detección según edad y antecedentes.
  • Consultar a un especialista ante cualquier cambio o síntoma inusual.
  • Promover el autocuidado y el acceso a información confiable.

La educación es clave para generar conciencia. Brindar información clara y basada en evidencia nos permite construir una narrativa positiva sobre la vacunación contra el VPH, los chequeos médicos regulares y los beneficios de la detección temprana”, subrayó la doctora Bugarín.

El estudio de Economist Impact subraya en este mismo sentido en que las desigualdades sociales deben atenderse especialmente, debido a que las mujeres de menores ingresos tienen menos posibilidades de acceder a controles de rutina y muchas llegan al diagnóstico en etapas avanzadas. Esto convierte al cáncer de cuello uterino en un desafío sanitario y social, que requiere la acción conjunta de gobiernos, instituciones y sociedad civil.

Cáncer de cuello de útero Foto: Freepik

Cómo prevenir el VPH, la principal causa del cáncer de cuello uterino

Lamentablemente no existe un tratamiento efectivo para eliminar el VPH por completo, pero si hay opciones para poder abordar sus consecuencias dentro de la medicina. Existen dos tipos de prevención:

  • Prevención primaria: Es la prevención que se realiza antes de que la persona tenga contacto con el virus. Para ello la educación sexual es crucial debido a que previene muchas enfermedades y embarazos no deseados.
  • El uso correcto del preservativo reduce el riesgo de transmisión, aunque no brinda una protección total, ya que el virus puede estar en zonas de la piel y/o de las mucosas no protegidas por el látex. Aun así, es una medida importante para la prevención de infecciones de transmisión sexual.
  • Prevención secundaria: consiste en chequeos médicos de rutina, como el Papanicolaou (PAP) y el test de VPH, que permiten un diagnóstico precoz y el tratamiento oportuno de las lesiones.

El test de VPH es una prueba que detecta la presencia de los tipos de virus que pueden causar cáncer de cuello de útero. Su procedimiento es similar al del PAP y está recomendado a partir de los 30 años. En caso de ser positivo, significa que hay VPH en el cuello del útero, y un PAP permitirá evaluar si ha generado lesiones