Para llenar de alegría el hogar: el truco sencillo para atraer gorriones al jardín, balcón o terraza de la casa

Las temperaturas más cálidas, los vientos de la primavera, el florecer de las plantas, el sol más intenso, todo esto hace que los aires se vean “renovados” y que las personas experimenten un nuevo “romance” por la naturaleza, muchas veces incluso desde la comodidad de su hogar.

Por ello, observar a la naturaleza desde el balcón propio o un patio que se tenga en el hogar puede resultar una experiencia única. Y en ese sentido, las visitas de los gorriones pueden llenar de alegría los jardines, terrazas o balcones.
Cómo atraer gorriones a nuestros hogar
La forma más simple y efectiva de atraerlos es colocar en una bandeja un poco de harina de maíz o polenta.
Este truco natural -que a la vez es muy económico y accesible- funciona como un gran atractivo para estas aves, que identifican rápidamente el alimento como una fuente segura de energía.
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Cabe destacar que los gorriones son aves granívoras e insectívoras, lo que significa que su dieta incluye tanto semillas y granos como pequeños insectos. Por ello, la harina de maíz es ideal porque es muy similar a los granos que se encuentran en la naturaleza y para ellos es fácil de digerir, además de aportarles la energía necesaria para llevar a cabo sus actividades.
Algunos consejos a la hora de atraer los gorriones en el hogar:
- No usar bandejas muy profundas, dado que les incomodará posarse en ellas con facilidad.
- Evitar que se humedezca el alimento, dado que puede deteriorarse y eso no resulta tan apetitoso para los gorriones. Esto implica también cambiar la harina de maíz a diario, a fin de mantener su frescura.
- Es aconsejable colocar la bandeja en un lugar tranquilo del balcón, patio o terraza, a fin de no entorpecer la tranquilidad de los gorriones cuando se acerquen a comer.
No solo atraer gorriones al hogar tiene un efecto positivo en cuanto a lo visual e incluso lo sonoro. Sino que además tiene beneficios ecológicos.

Es que con su presencia se ayuda a controlar la proliferación de insectos, pequeñas larvas y contribuyen así en fomentar una biodiversidad urbana más equilibrada, con un ecosistema más sano.

A todo esto, observar gorriones cerca puede ser toda una experiencia placentera y educativa para los más pequeños, que pueden aprender sobre la fauna local de forma divertida y amena.