Donald Trump endurece el visado y anuncia el lanzamiento de una “tarjeta dorada”

Estados Unidos anunció nuevas restricciones para los visados H-1B y presentó una “tarjeta dorada” para inmigrantes con alto poder adquisitivo y habilidades excepcionales.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firma una orden ejecutiva sobre la tarjeta visa dorada en la Oficina Oval de la Casa Blanca en Washington, D.C.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firma una orden ejecutiva sobre la tarjeta visa dorada en la Oficina Oval de la Casa Blanca en Washington, D.C. Foto: Reuters.

Estados Unidos impondrá nuevas y estrictas condiciones para la obtención de visados H-1B, una de las vías más comunes de ingreso legal al país para trabajadores extranjeros altamente cualificados, especialmente del sector tecnológico.

Según anunció el presidente estadounidense, Donald Trump, el Gobierno exigirá un pago anual de 100.000 dólares por cada visado H-1B, que deberán abonar las empresas que quieran contratar a profesionales extranjeros.

Visa de los EE.UU. Foto: Pixabay.

Estados Unidos y la búsqueda por reducir la contratación extranjera

El cambio representa un endurecimiento significativo del acceso a este tipo de visado, utilizado por empresas como Google, Amazon, Meta o Tesla, y afecta actualmente a unas 700.000 personas, en su mayoría procedentes de la India.

Con esta medida, Trump busca reducir drásticamente la dependencia de talento extranjero y “favorecer la contratación de trabajadores estadounidenses en sectores de alto valor añadido”, según explicó el mandatario.

El anuncio se realizó en una ceremonia oficial en la Casa Blanca, donde el presidente firmó la proclamación junto al secretario de Comercio, Howard Lutnick, quien fue especialmente enfático al justificar la medida.

“Tendrán que pagar el salario completo al empleado, además de 100.000 dólares al año por el visado. No es rentable. Si van a capacitar a alguien, que sea a un recién graduado de una de las mejores universidades de nuestro país”, señaló Lutnick.

El funcionario afirmó que todas las grandes empresas ya han mostrado su respaldo a esta política, que busca impedir que los trabajadores extranjeros sean utilizados como mano de obra barata. “Basta de traer extranjeros a ocupar nuestros empleos”, remató.

Trump, por su parte, ha criticado el programa H-1B en múltiples ocasiones por, según él, presionar a la baja los salarios y “desincentivar la contratación de estadounidenses”.

Trump lanza una “tarjeta dorada”: visado rápido a cambio de un millón de dólares

Además de encarecer el visado H-1B, Trump firmó una orden ejecutiva para lanzar un nuevo tipo de visado premium, conocido como la “tarjeta dorada”. Este nuevo programa está diseñado para atraer a extranjeros con habilidades excepcionales y grandes recursos económicos.

Quienes deseen acceder a este visado acelerado deberán pagar un millón de dólares al Tesoro de EE.UU., o dos millones si cuentan con el patrocinio de una empresa estadounidense.

“El objetivo es atraer a personas que no solo tengan talento, sino que puedan contribuir de inmediato a la economía nacional con inversiones significativas”, explicó Lutnick. Según el Gobierno, esta medida permitirá recaudar más de 100.000 millones de dólares, que se destinarán a reducir la deuda pública y los impuestos.

“Vamos a cambiar quiénes vienen a Estados Unidos. Solo aceptaremos a personas con habilidades excepcionales. En lugar de que vengan a quitar empleos, crearán empresas y generarán puestos de trabajo para los estadounidenses”, afirmó Lutnick.

Cambio de rumbo en la política migratoria y selectividad económica y profesional

Este nuevo paquete de medidas marca un profundo giro en la política migratoria estadounidense, enfocándose en la selectividad económica y profesional como eje central.

Mientras los sectores tecnológicos advierten sobre la posible pérdida de competitividad por la dificultad para atraer talento global, Trump insiste en que el país debe priorizar el empleo nacional y atraer capital, no mano de obra barata.

Donald Trump.
Donald Trump, presidente de los EE.UU. Foto: via REUTERS

El impacto de esta política será especialmente notorio en industrias tecnológicas y científicas, que dependen en gran parte del visado H-1B para acceder a personal cualificado.

Por ahora, la administración Trump asegura contar con respaldo empresarial, aunque la medida ya ha empezado a generar críticas entre expertos en innovación y educación superior.