Qué hacer cuando las hojas de la lengua de suegra se ponen amarillas: cómo salvarla para que vuelva a crecer

Descubrí cuáles son las causas más comunes y cómo salvar esta resistente planta de interior con cuidados simples y efectivos.
Lengua de suegra
Lengua de suegra Foto: Pexels

La lengua de suegra, también conocida como Sansevieria o espada de San Jorge, es una planta de interior altamente popular, debido a su resistencia, su estética y su fácil cuidado. Y aunque es muy pintoresca y resiste a todos los climas posibles del año, requiere de ciertos cuidados para mantenerse siempre erguida y verde. ¿Qué significa cuando sus hojas se doblan o empiezan a ponerse amarillas?

Este cambio de aspecto puede indicar problemas en el riego, la luz o el sustrato, y actuar a tiempo es clave para evitar que la planta se deteriore. Si las hojas de la lengua de suegra se doblan hacia el costado o incluso pierden su rigidez, es probable que esté sufriendo de un exceso de agua, ya que es una planta que no requiere de un riego frecuente.

Lengua de suegra Foto: Pexels

La solución más práctica es dejar secar completamente el sustrato antes de volver a regar. Asegurate de que la maceta tenga buen drenaje y evitá que el agua se acumule en la base.

¿Por qué las hojas de la lengua de suegra se vuelven amarillas?: posibles causas y soluciones

Cuando las hojas cambian a un tono amarillento, las causas pueden variar:

  • Riego excesivo: el problema más común. La humedad constante pudre las raíces.
  • Falta de luz: aunque tolera sombra, la Sansevieria necesita algo de luz indirecta para mantenerse sana.
  • Cambios bruscos de temperatura: el frío extremo o corrientes de aire también pueden afectar su color.
  • Plagas o enfermedades: cochinillas o hongos pueden provocar debilitamiento.
Lengua de suegra Foto: Pexels

Qué hacer para cuidar la planta lengua de suegra

Antes de realizar cualquier diagnóstico, es necesario que revises sus raíces para saber si están blandas o negras, ya que puede ser que se pudran con el paso del tiempo. Otro tip es cambiar la planta a un ambiente más luminoso, pero sin que le pegue el sol directo, ya que podría secarla aún más.

Por otro lado, usá un fungicida suave si hay señales de hongos, y retirá hojas en mal estado para evitar que se extienda y regala solamente cuando la tierra esté completamente seca (cada 15-20 días en invierno).

Lengua de suegra Foto: Pexels

Otra cosa que podés hacer para cuidar la planta, es limpiar sus hojas con un paño seco o apenas húmedo para quitar el polvo y ayudar a la fotosíntesis.

Si tu lengua de suegra muestra hojas dobladas o amarillas, no entres en pánico: es una planta resistente que suele recuperarse rápido si se corrigen los cuidados. Ajustá el riego, revisá la luz y observá su evolución. Con atención mínima y algunos ajustes, volverá a lucir fuerte y vibrante.