Un peligro para nuestro limonero: 5 errores que pueden arruinar el árbol y sus frutos

El limonero es un árbol del que se pueden aprovechar al máximo sus frutas. Y si bien no resulta tan difícil de cuidar, sí requiere las manutenciones normales y algunos consejos pueden resultar muy útiles para no cometer errores que podrían pagarse muy caros.
Durante la primavera -cuando las temperaturas suben y el árbol entra en plena actividad- es muy común que se cometan ciertos errores en cuanto al riego y los cuidados en general, que pueden afectar su crecimiento y producción de limones.

Los 5 errores más comunes que hay que evitar para mantener un limonero vigoroso y sano
Regar de más
En esta época el árbol necesita más agua que en invierno, pero el exceso puede ser fatal. Un sustrato constantemente encharcado impide que las raíces respiren y favorece la aparición de hongos y pudriciones. La clave está en mantener la tierra húmeda, sin que llegue a empaparse.
Riego irregular
Saltarse días o mojar solo una parte del suelo genera estrés hídrico, lo que afecta el crecimiento y la floración. Para lograr una producción abundante, hay que regar de forma constante y asegurarse de que el agua llegue a todas las raíces.
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No prestarle atención a la lluvia
En primavera, las precipitaciones suelen ser frecuentes. Si no se ajusta el riego en función del clima, se puede provocar exceso de humedad. Para evitar esto hay que observar el pronóstico y reducir el riego tras días lluviosos.
Regar a cualquier hora del día
El momento del día también influye. Si se riega al mediodía, gran parte del agua se evapora rápidamente y las raíces pueden quemarse. La mejor hora para hacerlo es temprano en la mañana o al atardecer.
No adaptar el riego al tipo de plantación
Un limonero en maceta necesita riegos más frecuentes, pero en menor cantidad, mientras que uno en tierra requiere riegos menos seguidos pero más profundos. Ajustar la frecuencia y el volumen de agua según el tamaño y ubicación del árbol es esencial para su bienestar.

Un consejo extra para saber cuidar mejor del limonero
No usar agua a temperaturas extremas
El agua demasiado fría o caliente puede dañar las raíces. Lo ideal es utilizar agua a temperatura ambiente para evitar cualquier tipo de shock térmico. En ese sentido, prestarle atención a la temperatura del agua no es un dato menor.
Con estos cuidados, es muy probable que el limonero pueda crecer fuerte, saludable y recompense a quien lo cuida con una cosecha llena de limones frescos y perfumados.



















