Un rincón soñado: la planta trepadora originaria de China que inundará tu jardín de flores amarillas

Resistente y fácil de cuidar, esta planta regala flores amarillas que iluminan cualquier espacio. Cuáles son sus características, los cuidados básicos y cómo transformar tu jardín en un lugar lleno de vida.
La planta trepadora originaria de China que inundará tu jardín de flores amarillas.
La planta trepadora originaria de China que inundará tu jardín de flores amarillas. Foto: Unsplash.

Las personas que cuentan con un jardín lleno de plantas y flores saben lo lindo que es tener un rincón propio para relajarse. Elegir qué plantar no siempre es sencillo, pero las trepadoras son una gran opción: se cuidan fácilmente, son muy vistosas y le dan un toque especial a cualquier espacio.

Entre ellas, el jazmín amarillo, también conocido como jazmín de invierno, se destaca por su facilidad de cultivo y su floración llamativa. A continuación, te contamos por qué es una planta ideal para tu jardín y cuáles son los cuidados básicos para mantenerla saludable.

Características del jazmín amarillo

El jazmín amarillo (Jasminum nudiflorum) es originario de China y se distingue por sus hojas pequeñas y sus flores de un amarillo intenso. A diferencia de otras variedades de jazmín, sus flores apenas desprenden aroma.

La planta trepadora originaria de China. Foto: Freepik.

Esta especie puede alcanzar hasta tres metros de altura, por lo que es perfecta para cubrir paredes o muros, siempre que se le proporcione un apoyo o tutor, ya que no se adhiere sola a los soportes. Es resistente y tolera bien las bajas temperaturas y otras condiciones adversas.

Con los cuidados adecuados, su crecimiento será más abundante y su floración, espectacular, apareciendo desde finales del invierno hasta mediados de la primavera.

Cuidados básicos del jazmín amarillo

  • Riego: prefiere un suelo con humedad moderada y buen drenaje. Tolera periodos de sequía, pero lo ideal es regarla aproximadamente una vez por semana, aumentando la frecuencia durante los días más calurosos.
  • Luz solar: crece mejor con seis a ocho horas de sol directo al día, lo que favorece su floración y mantiene el follaje saludable.
  • Sustrato: evitar el encharcamiento es clave. Lo recomendable es una mezcla de tierra de jardín, compost y perlita, con abono orgánico mensual, especialmente durante la floración.
  • Poda: la mejor época para podar es al final de la primavera, una vez pasada la floración. Hay que eliminar tallos secos o dañados, despejar el crecimiento excesivo y dar forma a la planta para mantener su tamaño y estética.
El jazmín amarillo se destaca por su facilidad de cultivo y su floración llamativa. Foto: Unsplash.

Con estos cuidados, el jazmín amarillo se convierte en una opción perfecta para quienes buscan una trepadora resistente, vistosa y fácil de mantener, que llene de color y alegría cualquier jardín o espacio exterior.