Este es el lugar donde se celebra la Navidad y el Año Nuevo antes que el resto del mundo: el curioso motivo

Gracias a su ubicación cercana a la Línea Internacional de Cambio de Fecha, este país se convierte cada año en ser el primero en el mundo en celebrar la Navidad y el Año Nuevo.

¿Dónde se celebra primero la Navidad?
¿Dónde se celebra primero la Navidad? Foto: Unsplash.

La particularidad que generan los husos horarios hace que ciertos países se vean “adelantados” o “atrasados” respecto del horario que rige en la Argentina y esto responde a una cuestión práctica que implica que en la Tierra, cuando en algunas latitudes es de día, en otras es de noche. Con esa premisa clara, hay un lugar en el mundo que tiene el honor de ser el primero en “recibir” el Año Nuevo y también la Navidad. Por su ubicación geográfica, estas remotas islas del océano Pacífico se pueden dar el lujo de ser pioneras en los festejos de fin de año.

Fuegos artificiales, foto Reuters
En este lugar se celebra primero la Navidad y el Año Nuevo, antes que en el resto del mundo.

¿Dónde se recibe primero la Navidad?

Se trata de un país poco conocido, pero que es mundialmente famoso por ser el primero en recibir la Navidad y el Año Nuevo. De hecho, una de sus islas es apodada la “Isla Navidad”: se trata de Kiribati, un archipiélago y país insular en la zona central del Pacífico que está integrado por un grupo de 33 atolones coralinos y la isla volcánica de Banaba, diseminados en un área de más de tres millones de kilómetros cuadrados.

La belleza natural de Kiribati. Foto: Wikipedia.

Su proximidad con la Línea Internacional de Cambio de Fecha (que atraviesa de norte a sur el Pacífico), hace que Kiribati esté entre 13 y 15 horas adelantada respecto de la Argentina.

Conociendo Kiribati: las curiosidades de este remoto país

Kiribati resulta un país fascinante. Una de sus curiosidades es que está ubicado en los cuatro hemisferios (Norte, Sur, Este y Oeste).

Las islas de Kiribati diseminadas a través del mapa. Foto: Wikipedia.

Otra de sus cuestiones muy llamativas es que este cúmulo de islas corre el riesgo de desaparecer en algún tiempo quizá no muy lejano. Y es que, por el cambio climático, muchos de sus atolones podrían acabar cubiertos por el agua (uno de los efectos del deshielo de los polos por el calentamiento global), lo que obliga a los kiribatianos a buscar medidas extremas de supervivencia, como comprar tierras en otro país, Fiyi.

Por supuesto, sus paisajes son los típicos de cualquier isla paradisíaca soñada: playas de arenas claras, cielo despejado, palmeras y un mar azul intenso que invita a soñar. Empero, no todo es belleza natural: lamentablemente la mano del hombre ha hecho estragos en muchas de estas islas y Kiribati fue utilizado como un sitio de pruebas nucleares y aún conserva vestigios de la Segunda Guerra Mundial, como sucede en otra nación insular cercana, Nauru.

Una foto de la Segunda Guerra Mundial en Kiribati. Foto: Wikipedia.
Vestigios de la Segunda Guerra Mundial en Kiribati. Foto: Google.

Gracias a su ubicación precisa, la isla Kiritimati (la conocida como “Isla Navidad”) es la primera en recibir cada fecha, por lo tanto, la primera en donde es Navidad y Año Nuevo.

Además, para entender mejor cómo vive su población (que justamente no es la que disfruta de sus islas paradisíacas, sino que lo hacen los turistas más adinerados), su capital Tarawa es uno de los lugares más densamente poblados, con una densidad similar a la de Hong Kong o Tokio, lo que hace que muchas veces la calidad de vida en el lugar no sea la mejor.

Eso sí, el país es uno de los que más territorio oceánico cuenta, más de 3,5 millones de km², en contraposición de una diminuta superficie terrestre, compuesta por estos mencionados 33 atolones y una isla coralina.

Un paisaje típico de Kiribati. Foto: Wikipedia.

En este remoto lugar, donde la alimentación es a base de pescado, se disfruta mucho del vóley y el fútbol es el segundo deporte en importancia, se vive de forma colectiva, donde el cristianismo es la religión más practicada y donde las celebraciones comunitarias se hacen sentir.

En definitiva, Kiribati tiene el particular honor de “llegar primero” a cualquier fecha que aun en el resto del mundo consideran como el futuro, algo que hace que este remoto lugar sea reconocido como uno de los más particulares y curiosos del planeta.