No es el perfume: el elemento natural que saca los malos olores de una casa para siempre

Un ingrediente que todo el mundo tiene en su cocina puede transformarse en un poderoso desodorante ambiental.
Se elimina el feo olor en un hogar.
Se elimina el feo olor en un hogar. Foto: Freepik.

Eliminar los malos olores del hogar puede ser un verdadero desafío. Muchas veces, se recurre a aerosoles, perfumes o difusores que solo enmascaran el problema por un rato. Sin embargo, existe un recurso económico y efectivo que ayuda a neutralizar los olores de forma duradera, sin químicos ni fragancias artificiales.

El café, especialmente en su forma de granos o molido, actúa como un desodorizante natural. Esto se debe a que contiene nitrógeno, un compuesto que ayuda a eliminar los olores al absorber las partículas responsables de generarlos. Por eso, colocar recipientes con café molido en lugares estratégicos de la casa, como el baño, la heladera o cerca de los tachos de basura, puede hacer una gran diferencia.

El café elimina los malos hogares de un hogar. Foto: Freepik.

Además, a diferencia de los aerosoles o perfumes ambientales, el café no enmascara el olor: lo elimina. Y lo mejor es que deja en su lugar una fragancia suave y agradable que no resulta invasiva. Por eso, cada vez más personas eligen este método sencillo, ecológico y económico para mantener su hogar libre de malos olores.

¿Cómo hacer que el café elimine el mal olor?

Gracias a su contenido de nitrógeno, el café -tanto molido como en granos- potencia la capacidad del carbono para absorber compuestos orgánicos volátiles, responsables de los olores desagradables.

Existen varias formas de aprovechar las propiedades desodorantes del café en distintas áreas de la casa:

  • Granos enteros en recipientes abiertos: colocarlos en el baño, la cocina, clósets o lavaderos puede generar un ambiente más fresco y agradable.
  • Café recién molido en bolsitas de tela: ideal para interiores de armarios, zapateros y cajones. Basta con guardarlo en sobres de tul o saquitos reutilizables y distribuirlos por el hogar.
  • Posos de café secos: reutilizables después de preparar la infusión. Una vez bien secos, se comportan como desodorantes naturales sin riesgo de generar humedad o moho.
  • Café como limpiador: mezclado con jabón o detergente, el café molido funciona como exfoliante natural para lavar platos, tazas y utensilios que retienen olores fuertes, como los de cebolla o pescado.

Además, si se desea intensificar su efecto aromático, se puede verter agua caliente sobre los granos o el café molido, lo que activa rápidamente su fragancia.