Ideal para vencer el calor y no prender el horno: la receta para hacer los mejores huevos rellenos con atún

Las altas temperaturas que azotan al país llevan a las personas a evitar prender el horno al momento de las comidas. En este contexto, existen una receta muy fresca y simple para vencer el calor: los huevos rellenos.
La receta de los huevos rellenos
Ingredientes

- 6 huevos
- 1 lata chica de atún o una papa chica hervida y pisada
- 2 cucharadas de mayonesa
- 1 cucharadita de mostaza (opción)
- Sal y pimienta
- Perejil picado o pimentón dulce (decoración)
El paso a paso de la preparación

- Hervir los huevos: colocalos en una olla con agua fría, llevá a hervor y contá unos 10 minutos desde que el agua rompe el hervor. Después pasalos por agua fría para que sea más fácil pelarlos.
- Cortarlos y sacar las yemas: pelá los huevos, cortalos al medio a lo largo y retirales las yemas con cuidado. Reservá las claras.
- Preparar el relleno: en un bol, pisá las yemas con un tenedor. Agregá la mayonesa, la mostaza y el atún escurrido (o la papa pisada si querés una versión más suave). Condimentá con sal y pimienta.
- Rellenar: con una cuchara o una manga, rellená las mitades de clara con la mezcla. Si te gusta, podés espolvorear un poquito de pimentón dulce o decorar con perejil picado.
- Llevar a la heladera: dejalos enfriar un rato antes de servir. Cuanto más fríos, mejor.
Huevos rellenos con paté
En caso de querer probar una versión más “argenta”, los huevos pueden rellenarse con paté. Para hacerlos, primero herví los huevos durante unos 10 minutos, enfriá con agua fría y pelalos.
Después, cortalos al medio y retirales las yemas con cuidado. En un bol, pisá las yemas con un tenedor y mezclalas con un par de cucharadas de paté, una cucharada de mayonesa y, si te gusta, un toque de mostaza. Condimentá con sal y pimienta a gusto.

Una vez lista la mezcla, rellená las mitades de clara con una cuchara. Podés decorarlos con un poco de pimentón dulce, perejil picado o una rodajita de aceituna arriba.
Por último, llevá los huevos a la heladera y servilos bien fríos. De esta manera, quedan cremosos, con mucho sabor y perfectos para comer en un día de calor.