Hirvonen y Gronholm son profetas en su tierra

Los Focus de los finlandeses dominaron en Finlandia, durante casi toda la segunda etapa, distanciándose del Citroen C4 del francés Sébastien Loeb. Aún la jornada del domingo, pero todo hace indicar que la victoria quedará para los de Ford.

Por Canal26

Sábado 4 de Agosto de 2007 - 00:00

El gran favorito y el joven piloto, ambos impresionantes, sólo dejaron a Loeb hacer el mejor tiempo en la ES12, la especial más resbaladiza, y se adjudicaron todos los demás tiempos scratch, seis seguidos en el caso de Marcus (ES13 a ES18), y dos para Mikko (ES19, ES20).

A falta de tres especiales y 43 km cronometrados para la llegada del domingo, se perfila otro doblete de Ford en Jyvaskyla, en el estreno del Focus 2007. Pero el director técnico Christian Loriaux, prudente, advertía: "Todavía no hemos ganado nada, podemos romper los dos motores el domingo por la mañana".

Pero es algo muy poco probable, ya que la mayoría de los pilotos punteros levantaron el pie del acelerador el sábado, por distintos motivos. Con 20 segundos más que Hirvonen y un minuto sobre Loeb, Gronholm puede dormir tranquilo después de una larga jornada.

Había 188 km de especiales, más de la mitad del rally, pasando dos veces por Ouninpohja (ES14, ES16), que algunos pilotos consideran la especial más bonita de todo el Mundial.

Probablemente el podio final se decidió en el primer paso por esa clásica de 33 km, en pleno bosque finlandés. Los tres primeros todavía seguían rodando a tope, con estilos distintos: ataque a fondo de Seb y Mikko, espectaculares, y más prudencia en el caso de Marcus, evitando saltar demasiado en los baches.

En los últimos kilómetros, Hirvonen se dio un buen susto. Con dos ruedas en la cuneta, logró volver a la carretera por poco, perdiendo apenas un puñado de segundo. Luego decidió calmarse, como Loeb, que acababa de perder otros siete segundos en esa misma ES14.

"Hemos cambiado los reglajes, no hemos puesto los mismos neumáticos. He hecho todo lo que podía pero no he logrado rodar tan rápido como los dos finlandeses", decía Loeb, cuando había pasado de estar a 20 segundos a estar a 40 en cinco especiales.

Loeb tuvo que reconocer el dominio de los Ford bajo el sol, que estaba de vuelta haciendo sombra a los demás pilotos y en especial al español Dani Sordo, que sufrió una avería en el motor de su Citroen C4, y a Petter Solberg, que tuvieron que abandonar en plena ES15.

El noruego, campeón del mundo 2003, decidió aprovechar para tomar el sol en plena carrera. Como decía Loeb, "hay días en los que hay que saber tomárselo con filosofía".