Al estilo Blair Waldorf: cómo vestirse “en capas” para no pasar frío este invierno 2025, sin dejar de estar a la moda

Con la técnica del famoso “layering”, es posible mantener el calor corporal, adaptarse a los cambios de temperatura y conservar el glamour durante los días más fríos. Te contamos cómo implementarlo en tu día a día.
Vestimenta en capas para el invierno.
Vestimenta en capas para el invierno. Foto: Pinterest.

Con la llegada del invierno, muchas personas se enfrentan al mismo problema: ¿cómo mantenerse abrigado sin sentirse incómodo o perder estilo? La respuesta está en una técnica tan simple como eficaz: vestirse en capas.

Conocida internacionalmente como “layering”, esta forma de vestirse no solo mejora la regulación térmica del cuerpo, sino que permite adaptarse fácilmente a los diferentes entornos del día, ya sea en exteriores, transporte público o espacios calefaccionados.

Vestimenta en capas para el invierno. Foto: Pinterest.

Pero el layering no consiste en colocarse ropa al azar una sobre otra. Para que funcione realmente, cada capa debe cumplir una función específica. A continuación, te explicamos cómo funciona este método que promete alejar al frío sin resignar el estilo.

El truco de las tres capas de ropa

  • Capa base: es la que está en contacto directo con la piel y debe mantenerla seca. Se recomiendan tejidos como la lana merino o el poliéster técnico, que permiten la transpiración. El algodón, en cambio, debe evitarse, ya que retiene la humedad.
  • Capa intermedia: su misión es conservar el calor corporal. Las prendas de polar, lana o plumón (natural o sintético) son ideales. En temperaturas extremas, se puede sumar más de una capa intermedia.
  • Capa externa: actúa como barrera contra el viento, la lluvia o la nieve. Para ello, se recomiendan materiales impermeables y cortavientos como el Gore-Tex o los softshells.

Vestirse en capas puede ser “cool”: cómo stylearlo correctamente

Más allá de lo funcional, el sistema de capas también puede ser estéticamente atractivo. El secreto está en la combinación inteligente de colores, texturas y largos:

  • Superponer prendas de distintos largos aporta dinamismo al look.
  • Consultar el clima permite ajustar la cantidad de capas necesarias.
  • Los accesorios como gorros, bufandas y guantes no solo abrigan, sino que aportan personalidad.
  • Priorizar materiales respirables mejora la comodidad y evita la humedad corporal.
Vestimenta en capas para el invierno. Foto: Pinterest.

Además, el layering no se limita al torso. Las piernas también necesitan protección en los días más fríos. Para ello, se recomienda:

  • Primera capa: calzas térmicas ajustadas.
  • Segunda capa: pantalones de tela gruesa, como denim o pana.
  • Capa externa: pantalones impermeables o térmicos para climas extremos.

Vestirse en capas no solo ayuda a conservar el calor corporal, sino que permite moverse con libertad, adaptarse a distintas situaciones y mantener una imagen cuidada.