Los sillones en el living ya no son tendencia: la opción más moderna y trendy que eligen los jóvenes

Lejos de ser una moda pasajera, muchos expertos aseguran que esta tendencia llegó para quedarse. El living deja de girar en torno a un único sillón y se transforma en un espacio versátil, pensado para distintos usos y estilos de vida.
La nueva tendencia en sillones.
La nueva tendencia en sillones. Foto: Pinterest.

Ese clásico sillón de tres cuerpos, protagonista durante décadas en los livings argentinos, está dejando de ser la pieza central de los espacios modernos. La tendencia actual busca mayor flexibilidad, estética más limpia y ambientes funcionales, adaptados a la vida contemporánea, donde la comodidad convive con el diseño y la practicidad.

No significa que los sillones van a desaparecer, pero sí reflejan un cambio en la manera de pensar los interiores. Cada vez más hogares reemplazan el mueble tradicional por piezas modulares, butacas individuales, puffs y banquetas, elementos que se ajustan a diferentes necesidades y usos del espacio. La idea es crear ambientes dinámicos y livianos, que permitan moverse libremente y aprovechar mejor cada metro cuadrado.

Las opciones en tendencia 2025 para el living

Puffs grandes

Son cómodos, fáciles de mover y se encuentran en distintos colores, por lo que permiten adaptar el living a distintos usos.

La nueva tendencia en sillones. Foto: Pinterest.

Sillones modulares bajos

Se pueden armar y desarmar según la cantidad de invitados o la actividad que se vaya a realizar.

La nueva tendencia en sillones. Foto: Pinterest.

Butacas individuales de diseño

Aportan estilo y personalidad al ambiente sin recargarlo, convirtiéndose en piezas versátiles que combinan comodidad y estética en cualquier rincón del living.

La nueva tendencia en sillones. Foto: Pinterest.

Banquetas acolchadas

Aunque la comodidad es limitada, son perfectas para ambientes reducidos, combinando estética y funcionalidad.

La nueva tendencia en sillones. Foto: Pinterest.

Este cambio está muy ligado a un estilo minimalista y moderno, donde se prioriza la circulación y la sensación de amplitud. Además, permite renovar el living sin grandes inversiones, aportando un aire fresco y juvenil que se adapta a distintos momentos del día: recibir visitas, descansar, leer o incluso trabajar desde casa.

Lejos de ser una moda pasajera, muchos expertos aseguran que esta tendencia llegó para quedarse. El living deja de girar en torno a un único sillón y se transforma en un espacio versátil, pensado para distintos usos y estilos de vida. La clave está en seleccionar muebles que sean cómodos, funcionales y estéticamente agradables, logrando un equilibrio entre diseño y practicidad.