Colegiales, el barrio con mejor calidad de vida en CABA: la historia de su curioso nombre y un vínculo desconocido con Chacarita

De los 48 que componen la Ciudad de Buenos Aires, hay uno que destaca por ofrecer un ambiente cálido e ideal para vivir. Así nació el distrito que ya cuenta con más de 160 años.
Casa en Avenida de los Incas y Corregidores
Casa en Avenida de los Incas y Corregidores Foto: Wikipedia

Los 48 barrios de la Ciudad de Buenos Aires tiene una esencia que los vuelve únicos y despiertan un atractivo diferente. En el caso de Colegiales, un reciente estudio de la Universidad de La Plata lo ubicó en el podio del ranking como el de mejor calidad de vida.

Delimitado por avenida de los Incas, avenida Elcano, Virrey del Pino, avenida Cabildo, Jorge Newbery, avenida Crámer, avenida Dorrego, avenida Álvarez Thomas y avenida Forest. Limita con los barrios de Belgrano al norte, Palermo al este, Chacarita al sur, y Villa Ortúzar al oeste. Un repaso por su historia y el vínculo desconocido con un vecino.

La historia de Colegiales está ligada a la de los barrios de Chacarita y Villa Ortúzar Foto: Instagram @buenosaires

El origen de Colegiales

El barrio debe su nombre a los alumnos de del Colegio San Ignacio (luego Colegio Real San Carlos y hoy Colegio Nacional de Buenos Aires), quienes solían pasar allí sus vacaciones y momentos de recreo.

En un principio, Chacarita, Villa Ortúzar y Colegiales formaban parte de una estancia jesuítica perteneciente a la Compañía de Jesús. Las tierras fueron cedidas por el entonces gobernador de Buenos Aires, Hernando Arias de Saavedra, y con el tiempo se llamaron “La Chacarita”. Este nombre proviene del vocablo antiguo “Chácara”, que se utilizaba con el significado de “huerta” y que, con el tiempo, se modificó por “chacra”.

Federico Lacroze (antiguo Camino de los Colegiales) en 1902, vista desde el Cementerio de la Chacarita Foto: Archivo General de la Nación

Desde el siglo XVII, la zona era denominada popularmente como La Chacarita de los Colegiales. El camino principal para llegar desde el centro hasta esos terrenos era el denominado Camino del Norte, hoy Avenida Cabildo.

Con los años, el crecimiento urbano hizo que los barrios se separen, quedando Chacarita, por un lado, y colegiales, por otro. Pero su vínculo histórico permanece en la memoria de los porteños.

Colegiales, un barrio que aprendió de otros

Colegiales tomó el aire residencial de Belgrano, la movida cultural de Palermo y la impronta barrial de Chacarita.

Un imperdible el Mercado de Pulgas, un enorme galpón donde se pueden encontrar antigüedades, muebles y piezas de colección. No se puede dejar de mencionar el polo gastronómico con bares y restaurantes que se mezclan entre las casas tradicionales.

Mercado de las Pulgas Foto: Wikipedia

¿Por qué Colegiales es el mejor lugar para vivir?

El estudio destaca a Colegiales por su tranquilidad, abundancia de áreas verdes, buenos índices de seguridad y una excelente ubicación dentro de la ciudad. Además, pese a estar entre dos polos con alta densidad como Palermo y Belgrano, mantiene su ritmo sereno y mucha identidad propia.

La zona conserva calles adoquinadas, casas bajas y espacios públicos llenos de vida, como plazas y paseos decorados con murales. También hay una fuerte presencia de medios, productoras, talleres artísticos, cafés y bares. Todo eso la convierte en una opción buscada por jóvenes y familias que priorizan la calidad del entorno.

Colegiales era el barrio con mejor calidad de vida de la ciudad, seguido por San Nicolás y Villa Ortúzar.[ Foto: Instagram @buenosaires

El primer barrio de CABA es más antiguo que el Virreinato del Río de la Plata

El barrio más viejo es Monserrat, ubicado en la Comuna 1 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.Dentro de sus límites se encuentran la famosa Av. de Mayo, el Cabildo, la Catedral, la Plaza de Mayo, la Plaza del Congreso y la manzana de las luces.

Su historia se remonta a la segunda fundación de la ciudad en 1580 por Juan de Garay. En principio fue llamado Montserrat por la iglesia que data del año 1750 y construida por el arquitecto Antonio Masella, a pedido del chacarero catalán Juan Pedro Serra en honor a la Virgen de Montserrat. Con el tiempo la “t” desapareció y quedó “Monserrat”.

Con una superficie de 2,2 km² tiene en sus límites a la Avenida Entre Ríos, Avenida Rivadavia, ramal oeste de la Avenida Leandro N. Alem, Bartolomé Mitre, Avenida Rosales, ramal norte de la Avenida La Rábida (norte), Avenida Ing. Huergo, Chile, Piedras, Avenida Independencia.