Santa Rosa: la mujer que detuvo a los piratas

Fue la primera mujer latinoamericana en ser canonizada por la Iglesia Católica. Una vida de meditación le ganó la victoria a Perú frente a un ataque holandés.

Por Canal26

Martes 30 de Agosto de 2022 - 13:47

Santa Rosa de Lima_Claudio CoelloCuadro de Santa Rosa de Lima. Claudio Coello. 

Como sucede todos los años por esta época, el nombre "Santa Rosa" empieza a sonar por todos lados e impone cierta tendencia. Siempre estuvo en discusión qué parte de mito y qué parte de realidad tiene la llegada de la tormenta con la que se relaciona, pero más allá del escepticismo, lo cierto es que la historia de la Santa Rosa de Lima, es imperdible.  

Todos los 30 de agosto se festeja el Día de la Santa Rosa de Lima y se suelen esperar tormentas alrededor de esa fecha; señalan, además, que se acerca el fin del invierno y el comienzo de la primavera.  

La Santa fue la primera mujer latinoamericana en ser canonizada por la Iglesia Católica. Nació como Isabel pero enseguida comenzó a ser llamada Rosa por su madre a causa de su belleza. Así es que cuando hizo la confirmación le cambiaron oficialmente el nombre.  

Vestida con túnica blanca y velo negro, se consagró por completo a dios. Parecía que vivía solo para meditar y rezar. Sólo salía para ir a misa y asistir a los enfermos. Pero esto fue lo que le ganaría la canonización cuando Perú se vio amenazado por piratas.  

A sus 29 años, en 1561, Rosa se enteró de que en las costas del Virreinato del Perú un barco holandés intentaba saquear las arcas. Rosa se instaló en la Iglesia e hizo lo que mejor sabía hacer pero esta vez acompañada. Reunió a las mujeres de Lima para suplicarle a la Virgen del Rosario la salvación de Lima.  

Ya todo parecía perdido y los holandeses comenzaron a desembarcar cuando una tormenta terrible se desató y detuvo a los piratas. Las personas atribuyeron el milagro a Rosa y la noticia circuló entre todos los católicos. Este hecho fue clave en la canonización que se le mas de 50 años después de su muerte.  

Rosa murió de una larga enfermedad a los 31 años. Aunque no todos lo sepamos, la nombramos cada agosto cuando llega la amenaza de una nueva tormenta.