Al igual que Leonor de España, la princesa Amalia de Países Bajos hará la formación militar: los motivos de su decisión
En las últimas horas, se dio a conocer que la heredera al trono neerlandés, la princesa Catharina-Amalia, hija de la reina Máxima y el rey Guillermo Alejandro, comenzará una formación militar a tiempo parcial mientras cursa una nueva carrera universitaria.
La noticia se comunicó durante la sesión anual de fotos de la Casa Real holandesa, donde la joven de 21 años hizo pública su decisión de unirse al “Defensity College”, un programa del Ministerio de Defensa que permite a estudiantes universitarios combinar sus estudios con actividades militares como reservistas: un grupo de personas que, aunque no están en servicio activo de forma permanente, pueden ser llamadas a servir a su país si es necesario.
La princesa Amalia decidió enlistarse al Ejército mientras continúa sus estudios: cómo serán sus próximos años
Amalia, quien está a punto de finalizar la licenciatura en Derecho, Política, Psicología y Economía (PPLE) en la Universidad de Ámsterdam, iniciará también una segunda carrera universitaria: Derecho Holandés. Al mismo tiempo, comenzará su preparación como soldado, aunque deberá postergar el inicio del entrenamiento físico debido a una fractura en el brazo que sufrió el mes pasado tras caer de un caballo.
El Defensity College contempla hasta tres años de formación, con actividades semanales en las que los participantes deben asistir en uniforme y realizar prácticas militares. Entre las disciplinas que se incluyen en el programa están el rappel, la escalada en montaña y otros entrenamientos propios de cada rama de las Fuerzas Armadas. Una vez finalizado su periodo de formación, la princesa podrá elegir entre Ejército, Marina, Fuerza Aérea o Policía Militar.
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Según el diario De Telegraaf, Amalia recibirá un salario estimado entre 2.300 y 2.500 euros brutos mensuales una vez alcance el grado de cabo. Esta iniciativa la alinea con otras herederas europeas que también han optado por una formación militar, como Leonor de España, Isabel de Bélgica o Ingrid Alexandra de Noruega.
Aunque el rol de jefe supremo de las Fuerzas Armadas no recae en la monarquía holandesa, Amalia sigue los pasos de su padre, el rey Guillermo Alejandro, quien completó su servicio militar en la Marina Real en 1987, y de su abuela, la reina Beatriz, licenciada en Derecho en los años 60.
Con este movimiento, la princesa muestra una clara voluntad de preparación integral para su futuro rol como jefa de Estado, combinando la formación académica con el entrenamiento institucional.
