La dictadura de Nicaragua cerró un orfanato e incautó todos sus bienes

Luego de las protestas populares contra Daniel Ortega, iniciadas en abril de 2018, se estima que el Estado cerró al menos 3.400 organizaciones.

Por Canal26

Viernes 19 de Mayo de 2023 - 19:05

Daniel Ortega, presidente de Nicaragua, Foto ReutersDaniel Ortega, el presidente de Nicaragua. Foto: Reuters.

Bajo el argumento de que no contaban con las credenciales del Ministerio de la Familia, el gobierno de Nicaragua canceló este viernes la personalidad jurídica a una asociación que brinda cuidado y resguardo a niños, niñas y adolescentes huérfanos desde 1995.

La disolución de la Asociación Misión Cristiana Verbo, a cargo del proyecto Casa Bernabé, inscrita desde el 27 de marzo de 1995, fue aprobada por la ministra nicaragüense de gobernación, María Amelia Coronel.

Según el gobierno, esa asociación benéfica que alberga a cerca de 50 niños fue ilegalizada por incumplimiento de leyes, "ya que no cuentan con las credenciales del Ministerio de la Familia para operar como Centro de Internamiento de Niños, Niñas y Adolescentes".

Y argumentó que el Ministerio de la Familia notificó a la ONG afectada, desde el 2020, "que Casa Bernabé, proyecto de la Asociación Misión Cristiana Verbo, no reunía las condiciones para el cuidado de los niños, niñas y adolescentes, siendo éste cerrado desde esa fecha".

Daniel Ortega, Nicaragua. Foto: ReutersDesde que está Ortega en el poder, se cerraron al menos 3.400 organizaciones. Foto: Reuters.

A pesar de la notificación, Casa Bernabé siguió operando, "violentando la Asociación Misión Cristiana Verbo lo resuelto por el Ministerio de la Familia, al estar funcionando al margen de las leyes que lo regulan".

Daniel Ortega, Nicaragua. Foto: EFE

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Incautación de bienes

Como si no fuese poco, además de aprobar la cancelación de la personalidad jurídica a la Asociación Misión Cristiana Verbo, el gobierno nicaragüense ordenó decomisar sus bienes muebles e inmuebles.

El proyecto Casa Bernabé operaba en la comunidad de Veracruz, en las afueras de Managua, y en el municipio de Bilwi o Puerto Cabezas, en el Caribe de Nicaragua, una de las zonas más pobres y aisladas del país centroamericano.

Según su página web, pasó de ser un puñado de edificios pequeños, con paredes delgadas y piso de tierra, a un campus en pleno funcionamiento que atendía a 47 niños huérfanos, abandonados y desatendidos de 6 a 18 años.

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