¿Tu gato araña los muebles?: los expertos revelan los pasos a seguir para que deje de hacerlo

Para los amantes de los gatos, el instinto natural de estos animales de afilar sus garras puede convertirse en un problema serio cuando los muebles pasan a ser sus objetivos principales. Sin embargo, con algunas estrategias efectivas, es posible enseñar a los gatos a evitar estos elementos y optar por opciones más adecuadas.
Con estas estrategias, que requieren algo de tiempo y paciencia, los dueños de gatos pueden estar tranquilos sabiendo que hay soluciones prácticas para uno de los problemas más comunes de la convivencia con estas adorables mascotas.

Gatos, mascotas. Foto: Unsplash.
Muebles intactos, dueños felices
El primer paso fundamental es ofrecer a los gatos alternativas adecuadas para rascar. Los expertos recomiendan colocar varios rascadores en distintas áreas de la casa, especialmente cerca de los muebles que los gatos suelen rascar. Estos rascadores vienen en diversos tamaños y formas, como postes verticales y tablas horizontales, permitiendo seleccionar los más adecuados para cada gato.
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Una vez que se colocaron los rascadores, el siguiente paso es hacerlos atractivos para los gatos. Rociar los rascadores con catnip o hierba gatera puede ser una excelente forma de atraer su atención. Además, es importante recompensar a los gatos con golosinas o elogios cada vez que usen los rascadores, reforzando así el comportamiento positivo.

Gatos, mascotas. Foto: Unsplash.
En caso de que el gato sea sorprendido arañando los muebles, es esencial redirigir su atención de inmediato hacia los rascadores. Un ruido fuerte puede interrumpir el comportamiento no deseado, y llevar al gato al rascador más cercano le enseñará que es ahí donde debe rascar.
Otra táctica efectiva es proteger los muebles con materiales que resulten poco atractivos para los gatos, como cinta adhesiva de doble cara, plástico o aluminio. Estos materiales, al ser texturizados y resbaladizos, disuaden a los gatos de rascar los muebles, dirigiéndolos hacia los rascadores.
La clave del éxito radica en la paciencia y la consistencia. Enseñar a un gato a cambiar su comportamiento puede llevar tiempo, pero con esfuerzo y dedicación, es posible lograr que los muebles de la casa se mantengan en perfecto estado, mientras los gatos disfrutan de sus rascadores.