Con solo unas pequeñas modificaciones en la vida diaria, se puede alcanzar el éxito y hacer una gran diferencia a futuro. Los detalles.
Por Canal26
Viernes 8 de Noviembre de 2024 - 20:30
El envejecimiento es una etapa marcada por la pérdida de la energía y vitalidad que tarde o temprano nos llega a todos, pero alcanzar una longevidad óptima es posible. En ese sentido, los hombres de 60 años suelen sentirse atrapados en un destino que pareciera irreversible, pero nada más lejos que eso.
Cabe resaltar que los hombres viven en promedio seis años menos que las mujeres debido a diferentes factores biológicos. En ese sentido, es muy importante que tomen unos pequeños hábitos en su estilo de vida que pueden tener un impacto positivo en el proceso de envejecimiento y en la calidad de vida.
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El sueño juega un papel crucial en la longevidad y la salud general, aunque a menudo no se tiene en cuenta su importancia. Establecer un horario de sueño regular es uno de los cambios más transformadores para la salud. El cuerpo humano necesita períodos regulares de descanso para repararse y funcionar de manera óptima, y los beneficios van mucho más allá de la sensación de descanso inmediato.
Diversas investigaciones indican que los hombres que duermen lo suficiente y a horas constantes viven en promedio 4,7 años más que aquellos con patrones de sueño irregulares.
Otro hábito que es clave para la longevidad masculina es el entrenamiento a intervalos de alta intensidad o HIIT. En contraste con la idea de que el ejercicio debe durar horas, el HIIT consiste en hacer ejercicios intensos de corta duración, alternando con períodos acotados de recuperación.
Los estudios demuestran que incluso con tan solo 12 minutos de HIIT a la semana se pueden obtener beneficios para la salud del corazón, mejorar el estado de ánimo y optimizar hormonas relacionadas con la longevidad.
El ayuno intermitente es un método es simple que tiene efectos favorables en la salud celular y en la reducción de riesgos de enfermedades crónicas. Este permite que el cuerpo descanse de la digestión y enfoque su energía en la regeneración celular, disminuyendo el riesgo de enfermedades ligadas al envejecimiento.
El esquema más común de ayuno es 16/8 (ayuno de 16 horas y alimentación en un periodo de 8 horas), el cual mejora el peso de los pacientes, los niveles de colesterol y el azúcar en sangre, así como también la claridad mental y la calidad de sueño. Además, ayuda a reducir molestias digestivas.
Cabe resaltar que, cada uno de estos hábitos son muy fáciles de implementar, de bajo costo y pueden incorporarse en cualquier estilo de vida. Con solo unos pequeños cambios, se pueden observar efectos duraderos y mejorar la longevidad masculina, acortando la brecha entre la expectativa de vida entre hombres y mujeres.
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