Comprar más por menos: consejos y tips para sacarle provecho a las compras mayoristas y comunitarias

El espacio, el stock y las fechas de vencimiento, algunos puntos claves a tener en cuenta a la hora de hacer comprar grandes para optimizar el rendimiento del dinero.
Precios mayoristas
Precios mayoristas

En tiempos de inflación y bolsillos ajustados, cada peso cuenta. Por eso, cada vez más familias argentinas buscan alternativas para ahorrar sin resignar cantidad ni calidad. Una de las tendencias que viene ganando espacio son las compras mayoristas y, más recientemente, las compras comunitarias.

Ambas opciones permiten abaratar costos y aprovechar mejor la organización entre vecinos o grupos de consumidores. Tanto para abastecerse durante varios meses como para compartir un pedido grande con otras familias, esta modalidad se volvió una de las preferidas por los consumidores que buscan cuidar el bolsillo.

Precios mayoristas
Precios mayoristas

Del mayorista a la casa

Históricamente, los mayoristas fueron terreno de autoservicios y almacenes de barrio. Sin embargo, en los últimos años los hogares también comenzaron a recorrer los pasillos de distintas marcas mayoristas como Makro, Vital, Yaguar, Diarco o Maxiconsumo, y de distintas pymes que se dedican a la venta mayorista.

La compra en mayoristas es la que más creció en el último año, un 28%, comparado con supermercados y mercados pequeños, según una encuesta del Observatorio del Shopper Argentino realizado por In Store Media en colaboración con la consultora Ipsos. publicada en junio de este año.

Canales de compra más usados por los argentinos. Foto: Observatorio del Shopper Argentino, IPSOS

La lógica es simple: al comprar en mayor cantidad, el precio por unidad baja. Por ejemplo, un pack de seis botellas de aceite o un “fardo” de arroz o fideos puede costar entre un 10% y un 25% menos por unidad que en un supermercado tradicional.

Compras comunitarias: la organización familiar o vecinal como estrategia

A la par de esta tendencia, surgió otra modalidad: las compras comunitarias. En barrios de distintos puntos del país, familiares o vecinos se organizan para comprar juntos y acceder a precios de mayorista, aunque cada familia se lleve solo una parte. Así, un grupo puede comprar un cajón de frutas, una bolsa grande de arroz o un pack de detergentes, y repartirlo entre los integrantes.

Qué gana el consumidor

  • Mejor precio por unidad: tanto en mayoristas como en compras comunitarias.
  • Menos viajes al supermercado: al comprar más cantidad en una sola vez, se reducen las visitas.
  • Posibilidad de planificar mejor el consumo mensual.
Inflación, compras, supermercado. Foto: Reuters.
Inflación, compras, supermercado. Foto: Reuters.

Consejos para aprovechar al máximo las compras mayoristas

Comprar en mayoristas puede ser una gran estrategia de ahorro, pero para que funcione de verdad hay que organizarse. Acá van algunas claves a tener en cuenta:

1. Pensar en el espacio antes de comprar.

No sirve de nada llevarse medio depósito de productos si después no tenemos dónde guardarlos. Lo ideal es medir bien qué lugar de la casa se puede destinar para esto.

2. Armar un plan de consumo.

Conviene anotar qué productos básicos se usan en el hogar y en qué cantidad aproximada en un período de tres o cuatro meses. Así se evita gastar de más en un artículo y olvidarse de otro que después habrá que salir a comprar más caro.

3. Aprovechar lo “fuera de temporada”.

Muchos artículos tienen un precio más bajo cuando no están en el momento de mayor demanda. Ejemplo: repelentes, insecticidas o protectores solares, que suelen encarecerse en verano.

Stockear en el momento oportuno permite adelantarse a la inflación, siempre que se respeten las fechas de vencimiento.

4. Controlar las fechas y rotar lo almacenado.

Tener todo guardado no garantiza el ahorro si después se vence. Es recomendable ir consumiendo primero lo más cercano al vencimiento y tener algún tipo de registro de qué hay en stock para no perder de vista nada.

5. Comparar siempre

Aunque el mayorista suele ser más barato, no siempre la diferencia es tan grande. Vale la pena chequear precios de algunos productos en supermercados tradicionales o tiendas de barrio, porque a veces las promociones puntuales superan al mayorista.

Qué conviene comprar al por mayor

  • Productos no perecederos: arroz, fideos, legumbres, harina, azúcar.
  • Artículos de limpieza: detergente, lavandina, jabón en polvo.
  • Bebidas: agua, gaseosas, leche larga vida, jugos en polvo.
  • Productos de higiene personal: papel higiénico, jabón de tocador, shampoo.

Qué productos no rinden tanto

  • Frutas y verduras muy perecederas
  • Lácteos, carne y fiambres, salvo que se congelen.
  • Panificados frescos, que pierden calidad rápido.