De ser viral y conocer a Messi a la caída libre: las razones del abrupto cierre del restaurante de Salt Bae en Los Ángeles
El popular restaurante del chef turco Nusret Gökçe, mundialmente conocido como Salt Bae, dejó de funcionar el pasado 4 de junio en Beverly Hills, Estados Unidos. El cierre de este local, famoso por sus platos bañados en oro y por la teatralidad de su servicio, marca el ocaso de una era donde la viralidad pesaba más que el sabor.
La sucursal angelina de Nusr-Et, inaugurada en 2021, duró apenas cuatro años operativa. Según reportó el medio especializado Eater LA, el lugar ya no figura en sitios de reserva ni en Google Maps, y su desaparición del mapa gastronómico fue tan inesperada como llamativa.
El restaurante era conocido por sus precios descomunales y su estética pensada para las redes sociales. Platos como el “Amor dorado”, que alcanzaba los US$1.500, o un tomahawk cubierto en oro de 24 quilates por US$950, formaban parte de un menú que priorizaba el impacto visual. También ofrecía propuestas como sushi de carne con parmesano o wagyu a la parrilla servido con espectáculo incluido.
“Fue una moda. Una selfie con Salt Bae costaba más que una cena completa en otro restaurante”, resumió un excomensal en plataformas online. Con el paso del tiempo, la propuesta perdió atractivo y el fenómeno viral se fue apagando.
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¿Qué sucedió con la popularidad del chef Salt Bae?
El ascenso de Gökçe comenzó en 2017 gracias a un video donde rociaba sal de forma particular, lo que lo convirtió en un personaje mediático. Sin embargo, la fama trajo consigo varios escándalos.
En 2019 fue denunciado por retención de propinas en Nueva York, y dos años más tarde enfrentó una demanda laboral por horas extras, luego desestimada. En 2023 protagonizó un bochorno internacional al irrumpir en el campo durante la final del Mundial de Qatar para besar el trofeo, lo que le valió críticas y una sanción.
El cierre de Beverly Hills se suma al del restaurante en Las Vegas, que dejó de operar a principios de 2025. Actualmente, solo continúan funcionando dos sucursales en Estados Unidos: Miami y Nueva York. La estrategia del grupo ahora apunta a nuevos mercados internacionales como Ciudad de México, Ibiza y Roma.
“Sus platos eran para Instagram, no para el paladar”, señaló con ironía un crítico gastronómico consultado por Eater LA. Mientras Salt Bae se prepara para expandir su imperio fuera del país, su brillo en territorio estadounidense parece haber alcanzado su fin.
