El toque mágico que va a cambiar el puré de papas para siempre: la receta francesa que reinventa la clásica guarnición

El paso a paso clásico que combina la sencillez, la sofisticación y la cremosidad de la comida típica que acompaña a las familias argentinas.
Puré de papas.
Puré de papas. Foto: unsplash

El puré es la guarnición más pedida por los argentinos: ya sea acompañando una milanesa, un pedazo jugoso de carne, o como un pastel de papas, este clásico no puede faltar en el menú de casa familia.

El puré duquesa, es una elegante variante del tradicional puré de papas y una tradición de la cocina francesa que combina sencillez y sofisticación en partes iguales. Crujientes por fuera, suaves por dentro y con una forma de rosetón que conquista a la vista, estas pequeñas delicias son el acompañamiento ideal para carnes, aves o platos de fiesta.

Pastel de papa, el "plato principal" de "Ostende". Foto: Instagram @ostende_ba
Esta forma de hacer puré es ideal para el pastel de papas.

Esta receta tradicional es fácil de hacer y es perfecta para sorprender a los comensales en una ocasión especial, o simplemente para darse un gustito un día cualquiera.

Paso a paso: la receta que revolucionará el puré de papas

Ingredientes:

  • 1 kg de papas harinosas (variedades como Spunta o Kennebec son ideales)
  • 50 g de manteca
  • 3 yemas de huevo
  • Sal, pimienta y nuez moscada a gusto
  • 1 huevo batido (opcional, para pincelar y lograr un dorado parejo)

Preparación:

Primero, pelar las papas, cortarlas en trozos uniformes y cocinarlas en agua con sal hasta que estén completamente tiernas. Escurrir bien y pisar inmediatamente mientras aún están calientes. Es fundamental evitar los grumos: una textura lisa es clave para el éxito del puré duquesa.

Agregar la manteca y mezclar hasta integrar por completo. Luego, incorporar las yemas de huevo una por una, batiendo enérgicamente para obtener una mezcla suave y homogénea. Condimentar con sal, pimienta y una pizca de nuez moscada.

Puré de papas Foto: Pexels

Después, pasar la preparación a una manga pastelera con pico rizado. Sobre una placa enmantecada o forrada con papel manteca, formar pequeños rosetones, dejando espacio entre ellos.

Pincelar los rosetones con huevo batido para lograr un acabado más dorado y apetecible. Luego, llevar la preparación al horno precalentado a 200 °C y cocinar durante 15 a 20 minutos, o hasta que estén dorados y ligeramente crujientes por fuera.