Máxima y Guillermo de los Países Bajos modificaron de urgencia su agenda pública: el dramático motivo
Un accidente doméstico, pero de consecuencias públicas obligó esta semana a la Casa Real de los Países Bajos a suspender una de sus tradiciones más esperadas.
La princesa Amalia, hija mayor del rey Guillermo y la reina Máxima, sufrió una caída mientras montaba a caballo y debió ser intervenida quirúrgicamente. La noticia fue confirmada por la Casa Real, que indicó que la operación fue exitosa y que la joven permanecerá internada en el hospital universitario de Utrecht hasta el jueves.
Este imprevisto llevó a los monarcas a cancelar su participación en diversos actos oficiales, incluyendo la tradicional sesión fotográfica de verano, una costumbre anual en la que la familia real se deja ver en un ambiente relajado al aire libre.
Esta sesión, planeada inicialmente para el 12 de junio, fue reprogramada para el próximo 30 del mismo mes. Sin embargo, se espera que Amalia pueda estar presente, aunque probablemente aún esté en recuperación y con el brazo inmovilizado.
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La reina Máxima también suspendió un compromiso en Ámsterdam para permanecer junto a su hija. El rey, por su parte, acudió brevemente a un acto protocolar antes de dirigirse directamente al hospital, donde se encuentra acompañando a su familia.
Los detalles del accidente de la princesa Amalia de Países Bajos
El accidente ocurrió el martes, mientras los reyes participaban en un acto oficial. Fue en ese momento cuando la Reina recibió la llamada que informaba sobre el incidente.
Según medios especializados, la princesa mostró evidentes signos de dolor tras el golpe, pero la rápida respuesta del personal real y del equipo médico permitió estabilizar su condición.
En el momento del accidente, la reina Máxima se encontraba en el Palacio Noordeinde de La Haya, participando en la conferencia “Mind Us” sobre bienestar estudiantil. Al ser informada de lo ocurrido, abandonó el evento para acompañar a su hija en el hospital.
Amalia fue trasladada de inmediato y sometida a una intervención durante la noche. La joven, de 21 años, es una apasionada de la equitación y ya ha tenido otros episodios similares: en el pasado sufrió una dislocación de hombro y un esguince practicando este deporte.
La princesa de Orange, como se la conoce oficialmente, decidió asumir un perfil cada vez más activo dentro de la familia real. Tras culminar sus estudios secundarios, se tomó un año sabático antes de comenzar la Universidad en Ámsterdam.
No obstante, ante las amenazas recibidas por parte de un grupo criminal conocido como la "Mocro Mafia", debió trasladarse a Madrid para continuar sus estudios de manera más segura y discreta.
