Crisis política en Francia: renunció Élisabeth Borne como primera ministra y Macron busca renovar su Gobierno

Élisabeth Borne y Emmanuel Macron. Foto: Reuters.

Renunció la primera ministra de Francia, Élisabeth Borne, cuyo cargo se vio muy desgastado después de imponer medidas impopulares que le valieron el repudio de la ciudadanía como la reforma jubilatoria o la ley de inmigración. El presidente Emmanuel Macron, que cuenta con una fuerte imagen negativa, busca revitalizar su Gobierno un año y medio después de ganar la reelección. 

"Su trabajo al servicio de nuestra nación ha sido cada día ejemplar. Usted ha dirigido nuestro proyecto con el coraje, el compromiso y la determinación de las estadistas. Gracias de todo corazón", dijo  Macron en su cuenta en la red social de X.

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Después de 20 meses al frente del Ejecutivo, Borne, que es la segunda mujer que dirigió un Gobierno en Francia, carga con el peso de la fragmentación del partido gobernante en sus espaldas. Las dos leyes más criticadas por los franceses provocaron una fuerte ruptura de este espacio político. 

En este sentido, la ley de inmigración aprobada en diciembre de 2023 con el apoyo de la derecha conservadora y de la ultraderecha, provocó un quiebre del partido del presidente Macron, generando un fuerte descontento en su ala más izquierdista.

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El desgaste de Borne

Borne no pudo generar los consensos necesarios para hacer pasar las leyes de su Gobierno, lo que la obligó a acudir frecuentemente a un artículo de la Constitución que le permite adoptarlas sin voto de los diputados, pasando por arriba de la cámara. 

Élisabeth Borne y Emmanuel Macron. Foto: Reuters.

De esta manera, tuvo que superar 30 mociones de censura presentadas por la oposición en su contra, algunas de ellas ganadas por estrecho margen, como la que ocurrió después de la aprobación de la reforma de las pensiones por tan solo nueve votos.

En ese momento, su puesto al frente del Gobierno parecía frágil, pero Macron apostó por mantenerla en el cargo con la condición de que busque llevar a cabo los acuerdos necesarios para impedir una parálisis del país.

Elisabeth Borne habla durante las preguntas a la sesión gubernamental en la Asamblea Nacional en París. Reuters

Borne, de 62 años, procedente del Partido Socialista, no consiguió atraer ni a la oposición de izquierdas ni a la de derechas, un trabajo que ahora tendrá que afrontar quien la suceda. En este marco, el titular de Educación, Gabriel Attal, es el favorito para ocupar el puesto en el Gobierno, lo que, de confirmarse, lo convertiría a sus 34 años en el más joven primer ministro de la historia de Francia.