Qué es el cuscús, un alimento versátil y facilísimo de preparar que los chefs eligen para acompañar cualquier plato
Una de las grandes ventajas del cuscús es lo rápido que se prepara. Su versión precocida, que es la que más se encuentra en los supermercados, está lista en apenas cinco minutos, lo que lo convierte en una guarnición práctica e ideal para cualquier día de la semana.

A la hora de buscar acompañamientos para nuestras comidas, solemos pensar primero en el arroz, las ensaladas, las verduras asadas o las papas al horno. Sin embargo, hay otros alimentos que permiten variar y sumar nuevas opciones al plato.
En los últimos meses, el cuscús, también conocido como cous cous, empezó a ganar protagonismo en muchos platos. De hecho, la reconocida chef privada Lucía Scarpa —quien cocina para figuras como Nathy Peluso, Nicolás Tagliafico, Caro Calvagni y otras celebridades— lo incluye con frecuencia como acompañamiento en sus preparaciones.

Qué es el cuscús, un acompañamiento perfecto para todas las comidas
El cuscús es un plato originario del Magreb, típico de países del norte de África como Marruecos, Argelia, Túnez y Mauritania. Está elaborado a partir de pequeños granos de sémola de trigo duro, muy similares a un arroz pequeño, y aportan los mismos macronutrientes.
Una de las grandes ventajas del cuscús es lo rápido que se prepara. Su versión precocida, que es la que más se encuentra en los supermercados, está lista en apenas cinco minutos, lo que lo convierte en una guarnición práctica e ideal para cualquier día de la semana.
Esa practicidad lo vuelve súper versátil y permite usarlo como acompañamiento de carnes y verduras, o como base para ensaladas frescas y nutritivas.

Origen del couscous
Su origen es bastante incierto y hasta un poco enigmático. Se cree que pudo haber sido creado por los pueblos bereberes, que ya lo preparaban antes del año 200 a.C., según distintas interpretaciones históricas.
Otra referencia temprana aparece en un texto anónimo del siglo XIII sobre la cocina del Magreb y Al-Ándalus, donde se menciona de manera explícita la receta del cuscús. Con el tiempo, el plato se volvió muy popular en Al-Ándalus y entre la población morisca durante los siglos posteriores.
Propiedades de la sémola de trigo, la base del cuscús
La sémola de trigo duro es un ingrediente muy apreciado en la gastronomía por su sabor y su aporte nutricional. Es rica en hidratos de carbono —la principal fuente de energía del organismo— y, por cada 100 gramos en crudo, ofrece 12 gramos de proteínas, 69 gramos de carbohidratos y apenas 1 gramo de grasa.
También aporta vitaminas B9, B3, B4 y K, es baja en colesterol y contiene muy poco sodio, lo que la vuelve una buena opción para personas con hipertensión o niveles elevados de colesterol. Es importante destacar que no es apta para celíacos, ya que se elabora a partir de trigo.

Receta de cuscús base paso a paso
Ingredientes
- 1 taza de cuscús precocido
- 1 taza de agua o caldo de verduras
- 1 cucharada de aceite de oliva virgen extra
- ½ cucharadita de sal
- Pimienta
- Opcional: 1 cucharadita de mantequilla
Tips para conseguir el cuscús perfecto
- Usar la proporción correcta: Misma cantidad de cuscús que de agua o caldo.
- Hervir el líquido primero: El líquido debe estar hirviendo antes de volcarlo sobre el cuscús.
- Añadir sabor al líquido: Usar un buen caldo de verduras o pollo con un chorrito de aceite de oliva.
- No cocinar de más: Solo hidratar y reposar. Retirar del fuego en cuanto se añade el cuscús.
- Tapar durante el reposo: Dejar reposar tapado durante 5-7 minutos para que absorba todo el líquido.
- Separar con un tenedor: Una vez reposado, usar un tenedor para “rastrillar” y separar los granos suavemente.
- Añadir una materia grasa: Un poco de mantequilla o aceite de oliva al final ayuda a que quede más suelto y sabroso.
- Experimentar con especias: Cúrcuma, comino, pimentón, canela o ras el hanout, son especias que le van de maravilla.

Paso a paso
- Poner a calentar el agua o el caldo en una olla. Agregar sal (poca por el caldo tiene sal) y el aceite de oliva. Hervir.
- En un bol grande, colocar la taza de cuscús seco.
- Cuando el líquido esté hirviendo, verterlo sobre el cuscús en el bol. Remover rápidamente con una cuchara una sola vez para que se distribuya bien.
- Tapar el bol inmediatamente con un plato o film transparente. Dejar reposar durante 5 a 7 minutos, sin destapar.
- Pasado el tiempo de reposo y absorción del líquido, destapar.
- Añadir la mantequilla (si se usa) y, con la ayuda de un tenedor, raspar suavemente la superficie para separar los granos. Continuar hasta que esté completamente suelto y esponjoso.
- Servir como guarnición o base para otros platos. Frío o caliente.



















