Ola de calor extremo: los alimentos que se echan a perder rápido en la heladera
Durante las olas de calor, se debe tener en cuenta algunos detalles para evitar que se tire la comida guardada en el refrigerador, aunque haya temperaturas extremas. Qué dicen los datos.

Con los primeros días de calor extremo, algunos alimentos que se guardan en la heladera podrían sufrir algunas modificaciones y, en consecuencia, generar algunas enfermedades. Como este electrodoméstico trabaja al límite y necesita mayor tiempo de compresión, podría no enfriar lo suficiente.
Y cualquier pequeño fallo (abrir mucho la puerta, falla del motor, corte de luz, mala ventilación) puede hacer que algunos alimentos se deterioren en forma acelerada. Según un relevamiento realizado por Noticias Argentinas, incluso un corte de luz de 1–2 horas puede elevar la temperatura interna a niveles peligrosos.
Cualquiera sabe que no debe abrirse la puerta innecesariamente, bajar la temperatura al nivel más frío, dejar espacio alrededor para ventilación y poner una botella de agua congelada en los estantes altos, a fin de estabilizar la temperatura.

Alerta por máximas temperaturas: cuáles son los alimentos que se echan a perder incluso en la heladera
- Lácteos: son muy sensibles incluso a variaciones pequeñas de temperatura. Se estropean si la heladera sube por encima de los 7 °C.
- Leche, Yogures, Crema / crema de leche, Quesos blandos (cremoso, ricotta, mozzarella). Las señales del deterioro son: olor ácido, separación de fases, envase hinchado, sabor amargo.
- Carnes crudas: necesitan estar por debajo de 4 °C. Carne vacuna, Pollo, Cerdo, Pescados (los primeros en descomponerse). Señales: olor fuerte, textura pegajosa o viscosa, cambio de color.
- Pescados y mariscos: los más delicados de todos.
- Incluso dentro de una heladera funcionando, duran muy poco. Señales: olor demasiado fuerte, ojos opacos (si es entero), textura blanda o viscosa.
- Comidas ya hechas: cuando la temperatura interna de la heladera sube, las bacterias se reactivan: Guisos, Pastas cocidas, Arroz (especialmente riesgoso por Bacillus cereus).
- Salsas y pollo cocido: pueden tener burbujeo leve, olor ácido o “fermentado”, cambio de textura.
- Huevos y mayonesas caseras: el huevo es seguro solo si está siempre por debajo de 7 °C. La mayonesa casera es muy riesgosa.
- Embutidos y fiambres: jamón, queso feteado, mortadela, salame tipo milán (mejor resistencia, pero no invulnerable). Señales: borde seco, olor ácido, coloración gris.
- Verduras de hoja: no es que se vuelvan peligrosas, pero se deterioran muy rápido: Lechuga, Espinaca, Rúcula, Acelga se ponen “babosas”, con bordes negros y olor desagradable.

Recomendaciones clave
- Verificar la temperatura de la heladera: asegurarse de que se mantenga en 4 °C (40 °F) o
- No dejar los alimentos perecederos a temperatura ambiente: El tiempo máximo recomendado se reduce significativamente con el calor, a menudo a menos de dos horas.
- Almacenamiento hermético: Guardar los alimentos en recipientes herméticos para ayudar a mantener su calidad y prevenir la contaminación cruzada.
- Consumo rápido: Consumir las sobras y productos perecederos lo antes posible, incluso si están refrigerados, durante una ola de calor.
Al estar siempre encendidos la heladera y el freezer., las empresas de electricidad señalan que están entre los electrodomésticos que más consumen.
Hay, de todas formas, varios tips que conviene recordar: no introducir en la heladera alimentos calientes; abrir las puertas la menor cantidad de veces posible; ajustar el termostato para que el aparato no enfríe de más; limpiar al menos una vez al año la parte trasera; mantener instalada la heladera lejos de fuentes de calor.
















