Bush se hace responsable de los «datos erróneos» que usó para la invasión a Iraq

El presidente de EE UU, George W. Bush, asumió ayer la responsabilidad de los fallos existentes en los datos aportados por los servicios de inteligencia que se manejaron para decidir la guerra contra Iraq.

Por Canal26

Jueves 15 de Diciembre de 2005 - 00:00

 

En un discurso en Washington, el cuarto en unas semanas para defender su estrategia en Irak, Bush reconoció que esos datos, que aseguraban que el país árabe tenía armas de destrucción masiva, «resultaron erróneos».

«Como presidente, fui responsable de la decisión de ir a Irak y tengo la responsabilidad de solucionar lo que fue erróneo mejorando nuestros servicios de inteligencia, que es exactamente lo que estamos haciendo», afirmó.

Sobre las elecciones que se celebran hoy en Irak, advirtió de que los progresos tras los comicios pueden ser lentos. Seguramente «llevará un tiempo saber quién ha ganado, llevará un tiempo para que formen Gobierno», explicó Bush.

Más de 15 millones de iraquíes están convocados hoy a las urnas, por tercera vez este año, para elegir un nuevo Parlamento que pondrá fin al proceso de transición diseñado por EE UU.

En medio de una violencia que no cesa, más de 7.650 candidatos pertenecientes a 228 grupos políticos -18 de ellos coaliciones- compiten en busca de los 275 escaños que componen la Cámara.

Los árabes musulmanes sunnitas de Irak quieren corregir «el error» que supuso el boicot a las anteriores elecciones, las de enero, y participarán en los nuevos comicios en busca de una fuerza suficiente que les permita enmendar una Constitución que no aceptan. Políticos, religiosos e incluso grupos armados sunnitas han pedido repetidamente en las últimas semanas a sus correligionarios que acudan a las urnas.

Su boicot de los comicios de enero dejó en manos de los chiitas y de los kurdos el Parlamento que finalmente redactó la Constitución en la que los sunnitas rechazan fundamentalmente la definición de Irak como Estado federal. La coalición electoral sunnita, no obstante, ya ha denunciado que la Comisión Suprema electoral ha recibido sobornos de otros partidos para amañar los resultados.

Por su parte, la secretaria de Estado de EE UU, Condoleezza Rice, acusó a la comunidad internacional de eludir su responsabilidad y boicotear «de hecho» el proceso contra el derrocado dictador iraquí Saddam Hussein.

«El boicot daña al pueblo iraquí, que ahora trabaja para asegurarse la esperanza de justicia y libertad que Saddam le negó», afirmó mientras el Pentágono comenzó a elaborar una solicitud hasta por 100.000 millones de dólares más para Irak y Afganistán, indicaron legisladores, una cifra que incrementaría los gastos en ambas guerras a medio billón de dólares.

Por otro lado, el embajador estadounidense en Irak, Salami Khalilzad, dijo que al menos 120 prisioneros han sido objeto de abusos en dos centros de detención dirigidos por el Ministerio del Interior iraquí.