La ciudad donde siempre es de día: cómo se vive bajo el “sol de medianoche” y por qué atrae a turistas de todo el mundo
En algunas regiones del mundo, la noción de día y noche se ve completamente alterada por un fenómeno natural fascinante, más allá de las auroras boreales: el “sol de medianoche”.
En el extremo norte de Noruega, ciudades como Tromsø, Bodø y Hammerfest experimentan este evento durante los meses de verano, cuando el sol permanece visible durante las 24 horas del día.
Esta particularidad geográfica no solo influye en la vida cotidiana de sus habitantes, sino que también convierte a estas localidades en destinos turísticos únicos.
La ciencia detrás del “sol de medianoche”
El sol de medianoche ocurre debido a la inclinación del eje terrestre. Durante el verano en el hemisferio norte, la región ártica permanece expuesta a la luz solar constante, lo que impide que el sol se oculte por debajo del horizonte.
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Cuanto más cerca del Polo Norte, más prolongado es el periodo en que este fenómeno se mantiene, llegando en algunos casos a durar hasta seis meses en lugares como Svalbard.
La ausencia de oscuridad influye directamente en la rutina diaria de los habitantes de estas ciudades. La posibilidad de realizar actividades al aire libre a cualquier hora del día fomenta un estilo de vida más activo. Senderismo, ciclismo, pesca y paseos en kayak son algunas de las prácticas más comunes que se llevan a cabo sin importar la hora.
Sin embargo, la luz solar continua también supone un desafío para el descanso. El reloj biológico humano, regulado por la alternancia entre luz y oscuridad, puede verse alterado en estos entornos. Para contrarrestarlo, los residentes suelen instalar cortinas opacas en sus hogares y mantener horarios de sueño estrictos.
No obstante, la energía y el estado de ánimo general tienden a elevarse, lo que genera una sensación de bienestar durante esta época del año.
Un destino turístico singular
El sol de medianoche convirtió a Tromsø, Bodø y Hammerfest en destinos de gran interés para los viajeros. Quienes visitan estas ciudades pueden disfrutar de excursiones nocturnas bajo la luz del sol, como recorridos en barco por los fiordos, safaris de vida silvestre y visitas a impresionantes glaciares.
Durante esta temporada, también se celebran festivales y eventos culturales que resaltan la peculiaridad de vivir sin noche. Entre ellos, el “Midnight Sun Marathon” en Tromsø es uno de los más destacados, donde corredores de todo el mundo compiten bajo un cielo iluminado a la medianoche.
Además, la luz constante ofrece a los fotógrafos una oportunidad inigualable para capturar paisajes naturales sin preocuparse por la falta de iluminación.
Para quienes buscan una experiencia de un viaje fuera de lo común, las ciudades del norte de Noruega ofrecen un espectáculo natural impresionante y la posibilidad de descubrir cómo es la vida en un lugar donde la noche, al menos por un tiempo, simplemente no existe.
