La hermana de Laura Leguizamón rompió el silencio tras la masacre de Villa Crespo: "No era ella"

A una semana de la tragedia, Nora habló por primera vez con los medios de comunicación y aseguró que la familia está destrozada.
Laura Leguizamón junto a su esposo. Foto: Instagram/laural390
Laura Leguizamón junto a su esposo. Foto: Instagram/laural390

Pasó una semana de la tragedia que conmocionó al barrio de Villa Crespo y la hermana de la presunta asesina, Laura Leguizamón, rompió el silencio. La mujer aseguró que toda su familia se encuentra conmocionada y destrozada por el brutal asesinato.

En una entrevista con Telefe Noticias, Nora Leguizamón se mostró desgarrada por el hecho y aseguró no poder creer que su hermana haya sido capaz de asesinar a su esposo, Adrián Seltzer, y a sus dos hijos, Ian e Ivo, y que además de ese trágico escenario, haya elegido también quitarse la vida.

Laura Leguizamón y su esposo, antes de la tragedia en su casa de Villa Crespo. Foto: Instagram.
Laura Leguizamón y su esposo, antes de la tragedia en su casa de Villa Crespo. Foto: Instagram.

“Mi hermana era feliz, buena madre, buena amiga. Esto me partió al medio”, expresó la mujer, visiblemente triste, al tiempo que destacó el buen vínculo familiar con su cuñado: “Mi cuñado era una gran persona. Las dos familias estamos devastadas”.

Además, Nora resaltó que Laura atravesaba un grave episodio de salud mental desde 2024 y que, si bien recibió atención psiquiátrica, no logró estabilizarse y los síntomas volvieron después del fin de semana de Pascuas. “Pensaron que era estrés. Pero volvió a tener síntomas, aunque leves. Adrián creyó que podía controlarlo”,dijo.

“Mi hermana siempre fue la que resolvía todo. Súper Laura. Y creo que esa exigencia le jugó en contra”, se lamentó la mujer, al expresar que era el sostén de toda la familia.

Laura Leguizamón junto a sus dos hijos. Foto: Instagram/laural390
Laura Leguizamón junto a sus dos hijos. Foto: Instagram/laural390

La hermana de Laura Leguizamón pidió no minimizar la salud mental

Con mucho dolor, Nora reflexionó sobre la importancia que tiene no minimizar los signos de desregulación emocional y desestabilidad mental y sostuvo: “Me gustaría que esto sirva para que nadie más llegue a un lugar así. Yo tampoco vi la magnitud de lo que pasaba. Y eso me duele todos los días”.

“Somos una familia muy querida en el barrio, pero las reacciones de la gente duelen. Hay mucho juicio y poco entendimiento”, resaltó al enterarse de las cosas que los vecinos decían después del hecho. “Mi hermana jamás les habría hecho daño a mis sobrinos. No era ella. Estaba enferma. Y la mente, cuando colapsa, hace cosas que no se entienden”, concluyó.