Candela: la investigación a vínculos familiares

Candela Rodríguez, de 11 años, sigue desaparecida desde el lunes 22 de agosto. En lo que va de la búsqueda, unos 700 policías realizaron más de un centenar de allanamientos y cruzaron mil llamadas telefónicas para tratar de encontrar a la pequeña. Ninguna hipótesis es descartada por los investigadores.

La pista más firme que siguen por estas horas apuntaba a algunos integrantes del entorno familiar de la niña y a los personajes vinculados con el ambiente delictivo con los que algunos de ellos se relacionaban, tal como confirma el periodista Gustavo Carabajal.

Se sabe que hasta ahora, la familia no había recibido ninguna llamada extorsiva pidiendo rescate por la niña desaparecida el lunes pasado en Hurlingham y fue por este hecho que los investigadores centraron su atención sobre los miembros de la banda a la que pertenecía el padre de la menor, identificado como Alfredo Rodríguez.

El padre de la nena negó que la desaparición de su hija estuviera relacionada con su actividad como integrante de una organización dedicada a la piratería del asfalto, pero los policías comenzaron a cruzar las llamadas de sus ex cómplices.

Por otro lado, los investigadores también revisaron el cuadro de relaciones de otro miembro de la familia de la pequeña desaparecida, que tuvo vínculos con el líder de una banda de asaltantes que se refugiaba en la zona de la llamada Villa Corea, en el partido de San Martín.

Al cruzar las comunicaciones telefónicas recibidas por los integrantes del entorno familiar, descubrieron algunos nombres que conocían de los prontuarios policiales. Esto generó que el comité de crisis formado para buscar a la nena de 11 años designara a un grupo de policías bonaerenses para el seguimiento exclusivo de esta pista.

El resto de los uniformados continuaba con la tarea de comprobar la veracidad de cada una de las cientos de llamadas recibidas en las distintas líneas telefónicas habilitadas para que los testigos puedan aportar información sobre el paradero de la pequeña.

La otra hipótesis manejada es la de la posibilidad de que Candela hubiera sido tomada cautiva por una organización dedicada a la trata de personas.

Ante la complejidad del caso, el fiscal de Morón, Roberto Marcelo Tavolaro, quien tiene a su cargo la investigación, emitió un comunicado en el cual informó que se garantizaba la reserva identidad para todos los testigos que aportaran datos que permitieran localizar a la niña. Y se anunció la recompensa del gobierno bonaerense de $ 100.000 para informantes que den datos precisos. "Para ello pone a disposición de quien pueda aportar información, el sencillo trámite de presentarse en la Fiscalía General del Departamento Judicial de Morón, situada en la calle Colón 237, de Morón, provincia de Buenos Aires", dice el comunicado.