Nafta y gasoil: por qué los aumentos del combustible superan a la inflación acumulada de 2025
La inflación de noviembre fue de 2,5% y acumuló 27,9% en lo que va del año. Los motivos por los cuales la suba de nafta y gasoil quedaron por encima.

Los precios de la nafta y el gasoil registraron en 2025 subas que, en términos acumulados, quedaron por encima de la inflación general. Según datos del sector, mientras el Índice de Precios al Consumidor (IPC) avanzó a un ritmo más moderado en el año, los combustibles continuaron ajustándose mes a mes impulsados por una combinación de factores impositivos, costos internacionales y decisiones de política energética.
Combustible: la explicación sobre los aumentos de la nafta y el gasoil por sobre la inflación
Uno de los principales motivos detrás de esta dinámica es la actualización del Impuesto a los Combustibles Líquidos (ICL) y del Impuesto al Dióxido de Carbono que el Gobierno fue aplicando de manera escalonada. Estos tributos estuvieron congelados durante largos períodos en años anteriores y comenzaron a normalizarse en 2025, lo que tuvo un impacto directo en los precios finales en surtidor.

A esto se sumó la evolución del precio internacional del petróleo, que si bien tuvo momentos de estabilidad, se mantuvo en niveles elevados en comparación con promedios históricos. Las refinadoras trasladaron parte de esos mayores costos a los valores internos, especialmente en un contexto de menor intervención estatal sobre los precios del sector.
Otro factor clave fue el reordenamiento de los precios relativos que impulsó el Gobierno. En línea con su estrategia económica, el Ejecutivo buscó reducir distorsiones y subsidios implícitos, permitiendo que los combustibles acompañen más de cerca sus costos reales de producción, refinación y comercialización, incluso por encima del ritmo de la inflación general.

Desde las empresas petroleras explicaron que los aumentos también responden a la necesidad de sostener inversiones en exploración, producción y logística, en un contexto donde el sector energético es considerado estratégico. El desarrollo de Vaca Muerta y la infraestructura asociada requieren previsibilidad de precios y márgenes que permitan financiar nuevos proyectos.
De este modo, el resultado es que nafta y gasoil acumulan incrementos superiores al índice general de precios en lo que va de 2025, una situación que impacta tanto en el costo del transporte como en la cadena de precios de la economía. El Gobierno sostuvo que este proceso forma parte de una transición hacia un esquema más transparente, aunque reconoce que seguirá de cerca la evolución de los combustibles por su efecto en la inflación futura.



















