Guiño del Gobierno al FMI: las dos importantes medidas del Banco Central que responden a los reclamos más contundentes del mercado

Desde el Gobierno aseguran que estas decisiones forman parte de una hoja de ruta gradual de la economía. Los detalles.

Milei junto a Georgieva, titular del FMI
Milei junto a Georgieva, titular del FMI Foto: NA

El Gobierno dio un nuevo paso en su estrategia económica con la implementación de dos decisiones centrales del Banco Central, que impactarán de lleno en el mercado cambiario y en el programa macroeconómico. Las medidas apuntan a ordenar los flujos de dólares, reducir distorsiones y enviar una señal clara de previsibilidad a los inversores y en especial al Fondo Monetario Internacional (FMI), que le pidió a Javier Milei acumular reservas y evitar el atraso del dólar.

Una de las resoluciones más relevantes está vinculada a la flexibilización de ciertas restricciones operativas que afectaban al acceso al mercado oficial de cambios. Con esta modificación, el Banco Central busca normalizar el funcionamiento del sistema, reducir la presión sobre los dólares financieros y mejorar las condiciones para el ingreso y egreso de divisas, en línea con los pedidos del sector privado.

La segunda decisión clave se relaciona con el manejo de los pasivos remunerados y la política monetaria. El objetivo es seguir avanzando en la reducción de los desequilibrios heredados, contener expectativas inflacionarias y consolidar un esquema más consistente entre emisión, tasas de interés y tipo de cambio. Desde el equipo económico a cargo de Luis Caputo sostienen que se trata de un paso necesario para darle sustentabilidad al plan en marcha.

Luis Caputo, Javier Milei y Karina Milei.
Luis Caputo, Javier Milei y Karina Milei. Foto: NA

En el mercado, ambas medidas fueron leídas como un gesto de alineamiento con los lineamientos que viene reclamando el Fondo Monetario Internacional en el marco de las negociaciones con la Argentina. En particular, la necesidad de mayor claridad cambiaria, acumulación de reservas y reglas más simples para operar aparece como un eje central del diálogo con el organismo.

Desde el Gobierno aseguran que estas decisiones forman parte de una hoja de ruta gradual, que busca evitar sobresaltos y sostener el proceso de desinflación. Al mismo tiempo, remarcan que no se trata de un cambio abrupto del esquema cambiario, sino de ajustes puntuales para mejorar su funcionamiento.

Con este paquete, el Ejecutivo intenta reforzar la confianza del mercado y mostrar avances concretos en la normalización de la economía, en un contexto donde cada señal es observada con lupa por inversores, analistas y organismos internacionales.