Tiene millones de seguidores en Instagram y TikTok después de hacerse famosa con sus "¡Buenas buenassss!". En diálogo con canal26.com la conductora dominicana contó su historia de depresión y sobrepeso y cómo superó las dificultades.
Tres años atrás se estrenó en E! Entertainment un programa femenino hecho en Latinoamérica con el nombre de Ojos de Mujer. Con la conducción de Carla Medina y el análisis de tres panelistas, Erika de la Vega, Elizabeth Gutiérrez y Chiky BomBom, se propuso tratar diferentes temas de actualidad de interés en el mundo femenino. Una de estas cuatro damas, la dominicana Lissette Eduardo Cleto (36), cuyo nombre artístico es Chiky BomBom, se destacó por sobre las otras, causando gran impacto por los tres millones de seguidores que tiene en Instagram y los 10 millones en TikTok, logrados durante la pandemia.
Chiky Bombom, oriunda de República Dominicana, se hizo famosa por sus videos, que se viralizaron en plena pandemia, y en los que dejaba ver su chispeante personalidad y su optimismo. Con su ya clásico saludo "¡Buenas, buenas!", la Chiky conquistó a millones durante el confinamiento, y hoy ya es una personalidad consagrada en las redes sociales.
Con una personalidad que traspasa la pantalla y que hace que quien la mira se sienta cercano, se ganó los corazones de Latinoamérica al hacer pública su historia personal. "Ha sido una de mis herramientas para poder superar mis problemas y, a la vez, ayudar a otras personas con mis vivencias -reveló durante una charla virtual-. Y tengo que confesar que tengo muy pocos haters. Y cuando me toca una de esas situaciones, me doy un bañito de agua de coco para que todo me resbale. Si intercambiáramos nuestras vidas, ellos no podrían con la mía porque es muy pesada y nunca para".
Este jueves 21 de noviembre, a las 23, se estrena la cuarta temporada del ciclo, lo que generó la oportunidad para poder conversar con este torbellino femenino, madre soltera de un adolescente, que escondió su depresión del mundo regalando buena onda en las redes, hasta que ella misma sanó.
Como modelo para muchas personas, sobre todo mujeres de todas las edades, a Chiky le interesa que sus seguidores "se reconozcan. Muchas han perdido su identidad por equis razón, y yo quiero que se vuelvan a encontrar, que reconozcan que importan, que merecen que les pasen cosas buenas. Eso lo cambia todo. A mí me encanta que me reconozcan por la calle, porque siento que nací para esto. Soy del pueblo y cuando un desconocido me saluda y me abraza... no sé cómo explicarlo: siento que tengo una familia cibernética, que todo el que me sigue es porque se identifica de una u otra forma conmigo. Me emociono cuando me dicen: 'Tú me cambiaste la vida. Me levanté triste, veo un video tuyo y me cambia todo'. Entonces estamos haciendo una cosa muy positiva y la gente se identifica". ¿Qué mejor?
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Viendo las primeras temporadas de Ojos de Mujer y la última, se nota un importante cambio físico en BomBom. Ella lo explica con sencillez: "Me di un baño con unas ramas porque me habían echado mal de ojo. Por eso engordé y aunque me sentía sabrosa, me operé el estómago. Me sometí a una bariátrica y ¡chica! me cambió la vida por completo, por completo. Pero no es el camino más fácil porque cualquier operación a la que tú te sometas no hace milagros. Mi amor, no puede hacer mucho si no te cuidas; y si no cambias el chip de tu cerebro, después vuelves a lo mismo, ¿entiendes? Soy una mujer joven y tengo un niño, la vida me sabe a frutas, mi cuerpo es mi templo y no lo estaba cuidando. Siempre he sido gordita, pero gordita nice; me descuidé y engordé el doble, eso ya estaba afectando a mi salud. Y me di cuenta de que merecía mejorar. Ahora estoy ricota y voy a seguir mejorando. La gente nada más conoce lo lindo mío, mi carácter. Oculto mucho de mí, igualmente ellos siempre saben cómo es una y a quién siguen".
Apoyando esa postura personal frente al mundo es que se sumó al ciclo de E! Entertainment, donde siempre se tocan temas "controversiales, del aquí y ahora; situaciones por las que paso yo, pasas tu y pasan las que nos van a ver. Eso fue lo que más me encantó de esta cuarta temporada. Me gusta mucho la sinceridad con que hablan mis compañeras y todas mis opiniones fueron desde el fondo de mi corazón. Hasta lloré por el testimonio de una invitada que habló de un abuso que nadie conocía, ni su mamá lo sabía. Aclaro que es un show para toda la familia y no es exclusivamente para mujeres. Lo pensaron para empoderar, levantar a las caídas, pero es para el pueblo, para todo mundo, porque también se aprende mucho. Las que trabajamos en el show estamos más avanzadas que otras personas porque ya tenemos herramientas para resolver problemas. Tú y yo tenemos esa fuerza de levantarnos, pero hay muchas que no aprendieron a agacharse de nuevo para recoger la toalla. Si yo pude, todas podemos porque vengo de la nada, mi amor. Lo que no cuesta, lo que no duele, lo que ha pasado por un proceso, no se disfruta. Porque el diamante es diamante porque las piedras preciosas tienen que pasar por una presión primero antes de brillar. Esa es la vida y es lo que muchas mujeres tienen que entender. La presión es una lija que te moldea y te prepara para enfrentarte a todo".
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