Accesorios con impacto: las tres tendencias que marcarán el invierno 2025 en la moda femenina

El invierno 2025 llega con una clara declaración de intenciones: la moda femenina apuesta por accesorios que no pasen desapercibidos.
Las piezas pequeñas y discretas ceden lugar a formas más expresivas, donde el volumen, el color y la textura ganan terreno. En este nuevo panorama, tres elementos concentran la atención de diseñadores, estilistas y consumidoras: los collares de cadena, los aros extragrandes y los guantes largos.

Una por una, cómo se usarán los accesorios en tendencia este 2025
Los collares gruesos de eslabones amplios y apariencia robusta marcan una diferencia significativa respecto a temporadas anteriores.
Están pensados para llevarse por fuera del cuello de sweaters, poleras o camisas cerradas, generando contraste visual y volumen en el tercio superior del cuerpo. Algunos modelos incorporan dijes metálicos o detalles esmaltados, sumando sofisticación y juego estético.
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Los aros XL, por su parte, vuelven con fuerza tras varios años de discreción. En formatos redondos, rectangulares o geométricos, se destacan por materiales metálicos, piedras y una gama cromática que incluye azul, rojo, verde esmeralda y el clásico dorado.
Su impacto no se limita al vestuario nocturno: también complementan looks urbanos, relajados y monocromáticos, aportando carácter y equilibrio visual a cualquier outfit.
Sin embargo, quizás la irrupción más sorpresiva sea la de los guantes largos, que retoman protagonismo no solo como prenda de abrigo, sino como declaración de estilo.

En versiones de cuero, gamuza, tejidos o ecocuero, y en tonos que van del negro al mostaza o al estampado con bordados, esta pieza eleva la elegancia de tapados rectos y capas, añadiendo una impronta retro reinterpretada para el presente.
En el cambiante mundo de la moda, el giro hacia accesorios más audaces no es solo una cuestión estética, sino que responden a una lógica de reafirmación de un estilo más personalizado.
En tiempos marcados por climas extremos y jornadas intensas, las mujeres buscan elementos funcionales que además comuniquen seguridad, identidad y estilo. Así, el accesorio deja de ser un complemento y se convierte en un elemento más de la identidad visual.