Una importante empresa de productos orgánicos de Luján cerró después de 30 años: “Damos un paso al costado con dolor”

A través de un extenso comunicado publicado en la red social de Instagram, la compañía explicó que su modelo de trabajo “perdió sustentabilidad”. A pesar de ello, se mostraron optimista para “renacer” en el futuro.
El Molino Campo Claro, de Carlos Keen, Luján.
El Molino Campo Claro, de Carlos Keen, Luján. Foto: Carlos Keen.

El Molino Campo Claro, una empresa dedicada a la elaboración de productos orgánicos en la localidad de Carlos Keen (Luján), anunció el cierre de su producción tras 30 años de actividad.

Hemos resistido 30 años, y lo seguiremos haciendo, pero no de esta forma. Para nosotros el significado de Campo Claro va mucho más allá de una empresa o de un producto, y sabemos que para vos también“, comienza el comunicado.

El anuncio del cierre del Molino Campo Claro. Foto: Instagram @molinocampoclaro

Y continúa el texto publicado en la red social de Instagram: “Por eso te queremos contar que vamos a seguir perdurando, como una semilla guardada en la tierra hasta que vengan buenos tiempos“.

“Lo que no funciona más es el sostén económico de nuestra producción y de la fuerza de trabajo que la hacen posible”, explica la empresa dedicada a la elaboración de productos orgánicos en la localidad de Carlos Keen.

Los productos de Molino Campo Claro. Foto: Instagram @molinocampoclaro

En sintonía, aclara que “con errores y aciertos, hemos aguantado lo inimaginable para sortear los desafíos que nos tocaron, pero hoy, nuestro modelo de trabajo perdió sustentabilidad”.

En el comunicado, Molino Campo Claro plantea que “los pequeños productores de la agricultura orgánica perdemos competitividad contra el capital concentrado”.

Los productos de Molino Campo Claro. Foto: Instagram @molinocampoclaro

Y reconoce: “Damos un paso al costado con dolor, enojo y vergüenza, que hoy le ganan al orgullo de todos estos años de trabajo digno, los cientos de toneladas de alimento sano procesados, las miles de familias que nos eligieron para alimentarse conscientemente, y las miles de hectáreas que ayudamos a cuidar del veneno de la agricultura industrial”.

Por último, la empresa finaliza con un mensaje de esperanza hacia el futuro: “Ojalá con el correr de los días recuperemos la esperanza para permanecer vitales hasta que llegue la hora de renacer”.

El origen de Campo Claro

Campo Claro nació en 1995 como un pequeño establecimiento familiar, que abrió “La Tranquera” con la elaboración artesanal de harinas integrales y aceites prensados en frío, dando inicio a una trayectoria vinculada a la agricultura orgánica.

Trabajadores de Molino Campo Claro. Foto: Instagram @molinocampoclaro

“Desde sus inicios, la empresa sostuvo la vocación por la investigación y el perfeccionamiento permanente en la elaboración de alimentos saludables, manteniendo viva la impronta de su fundador, Harald Witomir Tomys, cuyos ideales marcaron la identidad del molino y fueron asumidos por todo el equipo de trabajo”, detalló el medio lujanense ‘El Civismo’.