Un pedacito del Himalaya en Argentina: el rincón que enamora con sus paisajes de ensueño y naturaleza extrema

Con sus cumbres nevadas, glaciares, valles verdes y ríos caudalosos, esta zona ofrece vistas que dejan maravillados a cada turista en su visita.
Un pedacito del Himalaya en Argentina.
Un pedacito del Himalaya en Argentina. Foto: mendoza.gov.ar

Entre montañas imponentes y valles que parecen no tener fin, existe en Argentina una región donde la naturaleza se muestra en su versión más pura y extrema. Sus picos nevados, glaciares eternos y ríos atraen a aventureros de todo el mundo que buscan desafíos al aire libre.

Este lugar ofrece la posibilidad de practicar deportes de montaña en todas sus formas, como, por ejemplo, trekking de altura, escalada en roca y hielo, rafting en aguas de deshielo y vuelos en parapente, convirtiéndose en el sitio ideal para los más aventureros. Sin dudas, es un destino donde la adrenalina y la contemplación se encuentran en cada paso.

Dónde queda el “Himalaya argentino”, un lugar para los amantes de lo extremo

Se trata del Cerro Aconcagua, ubicado en la provincia de Mendoza. Con 6.962 metros de altura, es el pico más alto de América y uno de los más desafiantes del mundo. Su presencia convierte a la región en un punto de encuentro internacional para andinistas y amantes de la naturaleza extrema.

Cerro Aconcagua, Mendoza. Foto: NA.

Con sus cumbres nevadas, glaciares, valles verdes y ríos caudalosos, los Andes mendocinos muestran paisajes que parecen sacados del Himalaya. La zona ofrece vistas que dejan maravillados a cada turista en su visita.

Qué hacer en el Cerro Aconcagua, Mendoza

Trekking para todos

El Parque Provincial Aconcagua es ideal para quienes buscan caminatas de distinto nivel. Hay senderos de baja dificultad, como la Laguna de Horcones, y rutas de alta montaña para los más experimentados que desean acercarse a los campamentos base.

Escalada y andinismo extremo

El desafío mayor es alcanzar la cumbre del Aconcagua, una expedición que puede llevar entre 12 y 15 días. Montañistas de todo el mundo llegan para intentar esta travesía, considerada una de las más exigentes del planeta fuera del Himalaya.

Rafting en aguas de deshielo

El río Mendoza es otro atractivo imperdible. Con aguas que descienden del deshielo cordillerano, ofrece cursos rápidos y emocionantes para practicar rafting. La temporada ideal es entre noviembre y marzo, cuando el caudal es más intenso.

Cerro Aconcagua, Mendoza. Foto: NA.

Parapente y vistas aéreas soñadas

Las laderas de la cordillera también son elegidas para volar en parapente. Desde el aire se obtienen panorámicas únicas de los valles, ríos y montañas, una experiencia que combina adrenalina y contemplación.

Escalada en hielo y glaciares

Durante el invierno, los glaciares y cascadas de hielo en la zona de Puente del Inca se convierten en un escenario perfecto para la escalada técnica. Es una actividad recomendada para aventureros con experiencia y guías especializados.

Pueblos de montaña con encanto

En la ruta hacia la cordillera aparecen localidades pintorescas como Uspallata, Potrerillos y Las Cuevas. Estos pueblos ofrecen gastronomía típica, hospedajes de montaña y acceso directo a circuitos de aventura.

Potrerillos, Mendoza. Foto Instagram @prazeresmendocinos.
Potrerillos, Mendoza. Foto Instagram @prazeresmendocinos.

Mendoza no solo atrae en verano con el andinismo, también en invierno se transforma en un paraíso para los deportes de nieve. Es un destino donde cada época del año ofrece una manera distinta de disfrutar el ‘Himalaya argentino’, y como si fuera poco, su famosa ruta del vino suma un encanto extra, haciendo que cada viaje sea mucho más que paisajes: una experiencia para todos los sentidos.