Javier Milei evalúa organizar una cumbre de presidentes de derecha en Buenos Aires en 2026
El Gobierno busca consolidar un eje conservador regional alineado con Estados Unidos y coordinar una agenda común en economía, seguridad y política exterior.
El presidente Javier Milei avanza en el diseño de una estrategia regional con fuerte impronta ideológica y geopolítica. El Gobierno nacional evalúa organizar en Buenos Aires, durante 2026, una cumbre de presidentes y líderes de derecha con el objetivo de consolidar un eje conservador latinoamericano alineado con los Estados Unidos y con una agenda común en materia económica, política y de seguridad.
Según fuentes oficiales, la Casa Rosada busca articular ese espacio junto a dirigentes como José Antonio Kast (Chile), Rodrigo Paz (Bolivia), Daniel Noboa (Ecuador), Santiago Peña (Paraguay) y Nayib Bukele (El Salvador).

La iniciativa apunta a establecer mecanismos de coordinación regional que funcionen como contrapeso de los gobiernos de signo progresista en la región, entre ellos los de Nicolás Maduro, Luiz Inácio Lula da Silva, Gustavo Petro y Yamandú Orsú.
Avanza el plan de Milei para reunir a presidentes de derecha en una cumbre regional
Uno de los ejes centrales del proyecto es la cooperación en temas económicos y de apertura comercial. En ese marco, Milei impulsa cambios en el Mercosur que permitan a los países miembros firmar acuerdos de libre comercio por fuera del bloque, una propuesta que genera tensiones internas y abre un debate de fondo sobre el futuro del esquema de integración regional.
En Balcarce 50 analizan como posible fecha para la cumbre el mes de marzo de 2026, en coincidencia con una nueva edición de la Conferencia Política de Acción Conservadora (CPAC), evento clave para el entramado internacional de la derecha liberal y conservadora.

La CPAC iba a realizarse en Argentina en diciembre de este año, pero fue postergada. En ese contexto, un sector del Ejecutivo trabaja para invitar formalmente a Donald Trump, aunque otras áreas del Gobierno prefieren manejar el tema con cautela.
Desde la mesa política oficial reconocen que la organización del encuentro aún está en una etapa incipiente y que podría reprogramarse para otra instancia del año. El proceso requiere, además, una compleja coordinación diplomática a través del Ministerio de Relaciones Exteriores, que encabeza Pablo Quirno. “Estamos recién barajando las opciones”, admiten en el oficialismo.
La iniciativa no es nueva en el discurso presidencial. Milei ya había planteado la idea de conformar una liga de países conservadores durante su participación en la CPAC de Mar-a-Lago, realizada entre el 14 y el 16 de noviembre de 2024. En ese escenario, el mandatario propuso crear un foro alternativo a la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para oponerse a la agenda 2030.

Durante ese discurso, el presidente propuso formar una “alianza de naciones libres, estableciendo nuevos lazos políticos, pero también comerciales, culturales diplomáticos y militares” y calificó el rol de la CPAC como “fundamental”. “Los Estados Unidos liderando en el norte, la Argentina en el sur, Italia en la vieja Europa e Israel en la frontera de Oriente Medio”, expresó.
En paralelo, el mandatario mantiene una intensa agenda internacional. La Casa Rosada confirmó su participación en el Foro Económico Mundial de Davos, que se realizará entre el 19 y el 23 de enero, y dejó trascender que busca un encuentro con Trump en Suiza.
Además, Milei viajará en marzo a Estados Unidos para participar de la “Argentina Week” en Nueva York y luego asistirá a la asunción de Kast en Chile, en una señal más del rumbo que el Gobierno busca consolidar en la región.
















