Historia del fútbol argentino: los 3 estadios que fueron “olvidados” por un golpe de Estado, tragedias o vandalismo

Argentina es popularmente conocido por llevar el fútbol en la sangre, una característica que lo lleva a tener una gran cantidad de canchas a lo largo y ancho del país. A pesar de ello, algunas fueron “abandonadas”. Conocé el detrás de cada una de ellas.

El estadio ACIR de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
El estadio ACIR de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Foto: La Nación.

Gracias a su tradición en este deporte, el fútbol argentino cuenta con una gran cantidad de estadios, alrededor de toda la Argentina. Sin embargo, algunos fueron “olvidados” a lo largo de la historia, ya que se disputaron pocos partidos allí u otros motivos.

Los 3 estadios “olvidados” del fútbol argentino

1- El estadio ACIR de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires

El estadio ACIR de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Foto: La Nación.

La historia comenzó el 27 de octubre de 1951, con la inauguración del Ciudad Estudiantil “Presidente Perón”, una escuela juvenil de formación política para capacitar a hijos de trabajadores. Sin embargo, con el golpe de estado de 1955, se usó como un centro temporario de detención de dirigentes peronistas.

La histórica cancha de la Asociación Comunitaria Integral de Rehabilitación (ACIR), rebautizada como Eva Duarte, se encuentra entre las calles Ramsay, Blanco Encalada, Dragones y Echeverría.

Está situado a apenas diez cuadras del estadio Monumental en el barrio porteño de Belgrano, y se lo conoce como “El Estadio Oculto” de la Capital Federal. Fue usado por dos clubes del Ascenso: Deportivo Español (entre 1968 y 1971), y Sportivo Italiano (1971).

En la actualidad, funcionan las dependencias del Servicio Nacional de Rehabilitación, un organismo del Ministerio de Salud. Es la base del movimiento paralímpico argentino y, además, se ubica el INCUCAI y una sede de la Universidad de San Martín, con carreras de recuperación física.

2- El estadio Adolfo López de Mar del Plata

El estadio Adolfo López, de Mar del Plata. Foto: SomosAldosivi.

La historia narra de 1990, cuando comenzó la supuesta creación de la cancha oficial de Aldosivi (Mar del Plata), club que actualmente milita en la Primera División. Luego de vender la sede ubicada en Bermejo y El Cano, el ‘Tiburón’ se traslada a los terrenos de la Usina 9 de Julio, en Martínez de Hoz y Vértiz.

El predio donde se construyó el estadio formaba parte de una antigua cantera, por lo que la cancha culminó “encajonada” entre las paredes de la misma. Por este motivo en particular, es que se lo conocía popularmente como “La Cantera”.

El trágico historial del estadio Adolfo López

En octubre de 1997, el juvenil Ezequiel Zapatosky murió en la cancha por un problema cardíaco. Dos meses más tarde, se accidentó al caer de una tribuna María José Cepeda, quien luego falleció por las secuelas.

El 9 de mayo de 1998 se produjo el deceso de Pedro Pica a causa de un infarto cuando salía de la cancha, en medio de disparos de balas de goma de la Policía sobre hinchas de Huracán de Corrientes, tras un partido por el Torneo Nacional B 1997/98.

El último hecho provocó la clausura del estadio e intimación a Aldosivi, quien decidió no realizar las obras exigidas y optó por vender los terrenos. Si bien hubo varios interesados en comprar el terreno, ningún proyecto se concretó y la cancha permanece abandonada.

3- El estadio de La Costa

El estadio de La Costa. Foto: La Nación.

Se inauguró en octubre de 1977 y está ubicado en uno de los lugares más habitados por los bonaerenses durante las vacaciones de verano: se encuentra en el kilómetro 344 de la Ruta 11, entre San Bernardo y Mar de Ajó.

Con una superficie de casi 15.000 metros cuadrados y una capacidad para más de 14.000 espectadores, fue un proyecto de la empresa Turismo Ecológico S.A., liderada por Horacio Eduardo Di Bari.

Durante su breve periodo de funcionamiento, la cancha albergó importantes eventos culturales y deportivos, recitales de La Renga, Los Pericos y Soledad Pastorutti, además de presentaciones del Ballet de Chile y hasta peleas del boxeador Jorge “Locomotora” Castro.

A pesar de ello, en el transcurso de los años cayó en desuso, principalmente en 1999, producto de problemas económicos y de seguridad. El estadio fue víctima de múltiples robos y vandalismo, llevándolo a su abandono total.