Qué hay de cierto sobre la jornada laboral de 13 horas en Argentina: la explicación oficial y el futuro de las horas extras
El Gobierno prevé media sanción al proyecto de ley de “modernización laboral” en el periodo de sesiones extraordinarias que se llevará adelante entre el 10 y el 30 de diciembre. Qué pasará con las horas extras y de cuántas horas será la jornada de trabajo.

El proyecto de reforma laboral que impulsa el Gobierno será tratado en sesiones extraordinarias y reemplaza el régimen clásico de horas extra por un sistema alternativo: el llamado “banco de horas”. La idea central es permitir que empleadores y empleados pacten por escrito cuándo y cómo se compensan las horas extra, en lugar de que siempre se paguen con recargo, por lo que se detalló qué va a pasar con esta modalidad de trabajo.
Bajo este sistema, durante los picos de demanda o periodos de alta carga laboral, un trabajador podría extender su jornada habitual. Luego, en épocas de menor actividad, compensar esas horas con días libres, jornadas más cortas o descansos. Todo debe definirse de forma voluntaria, con acuerdo escrito y con un registro verificable de las horas trabajadas.
Un punto clave del proyecto es que el recargo por horas adicionales dentro del banco de horas sería menor al vigente para las horas extra comunes (no más 50% o 100%). Es decir, cambia la lógica de remuneración.

Jornada laboral de 13 horas: qué dice el proyecto de reforma laboral del Gobierno
En este contexto: circuló fuertemente la comparación con la reforma laboral de Grecia, donde se aprobó una ley que permite jornadas de hasta 13 horas en días puntuales. Sin embargo, según el texto que difundió el gobierno de Javier Milei en Argentina, el proyecto no contempla una jornada fija de 13 horas diarias: el régimen de banco de horas debe respetar los topes semanales y los descansos mínimos diarios y semanales regulados por la normativa vigente.
Además, el proyecto prioriza los acuerdos por empresa por sobre los convenios sectoriales tradicionales, lo que permite adaptar los contratos a las necesidades de cada firma, pero aclara que cualquier acuerdo debe respetar límites legales en cuanto a jornada máxima semanal, descansos y derechos del trabajador.
La reforma sí modifica el modo de organizar el tiempo de trabajo porque incluye banco de horas, compensaciones flexibles y nuevos mecanismos de acuerdo, pero no establece por defecto jornadas de 13 horas diarias. Lo que hay es una posibilidad de flexibilización bajo acuerdo siempre y cuando se ubique dentro del marco legal de descanso y protección laboral.
De esta manera, las horas extras tal como se las conocen dentro del marco de empleador-empleado cambiaría para siempre. La idea del Gobierno es que se aplique media sanción en el Congreso con vistas a presentar el proyecto de manera oficial después de Navidad.
















