Tensión entre el PRO y La Libertad Avanza tras las designaciones en la AGN: “La relación está rota”
Desde el espacio amarillo dicen que el Gobierno pactó con el kirchnerismo tras las designaciones en la Auditoría General de la Nación (AGN). Los detalles.

La relación política entre PRO y La Libertad Avanza atraviesa un momento de fuerte tensión después de las recientes designaciones en la Auditoría General de la Nación (AGN). Varios dirigentes del espacio amarillo expresaron su descontento con la forma en que se resolvieron los nombramientos al considerar que se llevó adelante una decisión “a las apuradas” y sin la debida consulta entre las fuerzas que integran el oficialismo.
El enojo en el PRO se acentuó por la incorporación de dirigentes vinculados a La Libertad Avanza en cargos clave de la AGN, algo que varios referentes de esa fuerza interpretan como una distribución de espacios que no respetó acuerdos previos de composición de poder dentro de la coalición. La preocupación principal radica en que estos movimientos, según su visión, pueden afectar el equilibrio institucional de un organismo clave en el control del gasto público y la rendición de cuentas.
“Lo que pasó es una señal de debilidad institucional que termina afectando la credibilidad argentina en el mundo”, dijeron a Infobae allegados a Mauricio Macri, presidente del PRO.

PRO vs La Libertad Avanza: los detalles de la tensión entre el espacio de Macri y Milei
La iniciativa para nombrar auditores a Mónica Almada, por La Libertad Avanza; Juan Forlón, por el kirchnerismo; y Pamela Calletti, aliada del gobernador salteño Gustavo Sáenz, se dio como cierre de una extensa sesión en la que el oficialismo obtuvo la media sanción del Presupuesto 2026. Sin embargo, el resultado fue parcial: se aprobaron todos los capítulos excepto el Capítulo XI, considerado el eje central del proyecto, ya que incluía la derogación de normas que el Gobierno considera incompatibles con el objetivo de ajuste fiscal, como la Ley de Emergencia en Discapacidad y la Ley de Financiamiento Universitario.
La votación se realizó sin la participación del PRO, Provincias Unidas, la UCR y la Coalición Cívica. “Fue una maniobra burda. Designaron auditores de la AGN sin consenso, solo por un acuerdo político entre LLA y UP. Son dos caras de la misma moneda con este tema. No vemos que haya sido error reglamentario: fue una decisión política de copar la AGN ¿Qué rol de control va a cumplir si los auditores asumen sin legitimidad política?”, cuestionó un histórico diputado macrista en diálogo con Infobae.

“La relación está rota. Les va a costar mucho volver a ganarse nuestra confianza. Hace dos años los ayudamos desinteresadamente y ahora acuerdan con el kirchnerismo”, indicó de manera categórica un dirigente cercano a Ritondo.
En esa misma línea, añadió: “Cuando el control se define por mayoría circunstancial y no por acuerdos amplios, la Auditoría deja de ser técnica y plural y pasa a funcionar como una extensión del oficialismo. Es un retroceso claro en términos de calidad institucional, y la Argentina necesita justamente lo opuesto. Esto cambia la relación para lo que viene, vemos una negociación ley por ley, tema por tema”.
El escenario que se abre ahora está marcado por el paquete de reformas que impulsa Javier Milei, donde los votos del flamante bloque Fuerza del Cambio resultan determinantes para alcanzar el quórum necesario en el Congreso.
Mauricio Macri siguió de cerca el desarrollo de la sesión en la Cámara de Diputados. En un momento, el expresidente evaluó la posibilidad de que Jorge Triaca ocupara un lugar en la AGN. Desde su entorno señalaron que existe una “relación que está rota” y apuntaron responsabilidades al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, y al asesor presidencial Eduardo “Lule” Menem, a quienes acusaron de “haber pactado con los gobernadores del norte y haber cerrado filas con el kirchnerismo”.

“Las relaciones se construyen y se tienen que ir dando pasos sólidos hacia adelante, ahora se volvió a foja cero. Lo que pasó es una señal de debilidad institucional que termina afectando la credibilidad argentina en el mundo”, expresaron allegados al presidente del PRO.
Durante el debate, Cristian Ritondo fue categórico al rechazar el pedido de designación de auditores. “Es la violación al artículo 65 de la Constitución Nacional”, sostuvo al señalar que la propuesta fue impulsada por el oficialismo por fuera del temario habilitado para las sesiones extraordinarias. Además, adelantó que el bloque llevará el tema a la Justicia.
Otro de los focos de conflicto para el PRO fue el rechazo al artículo del Presupuesto que contemplaba el pago a la Ciudad de Buenos Aires de la deuda por coparticipación. Se trataba de un reclamo central del bloque amarillo y de una negociación encabezada por el jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, con el ministro del Interior, Diego Santilli. Desde el entorno del mandatario porteño señalaron a este medio que “seguirán trabajando incansablemente para que el Gobierno Nacional cumpla con el fallo de la Corte”.
“Fue un grave error que se incluyera en ese capítulo. Debería haber tenido un capítulo especial y ser tratado de manera diferenciada. Cumplir con los fallos judiciales es una obligación. Desde el PRO se planteó siempre. Creemos que el gobierno del presidente Milei tiene la misma vocación para hacerlo”, añadieron.
El malestar se profundizó por la estrategia legislativa del oficialismo, que incluyó el artículo favorable a CABA junto con otras modificaciones y con la derogación de las leyes de discapacidad y universidades. En el PRO interpretaron que se buscó forzar el acompañamiento de diputados como Oscar Zago, Eduardo Falcone, Karina Banfi o Álvaro González, integrantes del interbloque amarillo que mantenían una posición indefinida. Finalmente, el capítulo completo fue rechazado.
Este clima de tensión también se replica en la provincia de Buenos Aires, donde varios intendentes del PRO cuestionaron que La Libertad Avanza intente “trabar la gobernabilidad” en los Concejos Deliberantes locales.
“Lo que estamos viendo es que La Libertad Avanza viene jugando bastante a trabar, sobre todo en municipios del PRO. Pasó en Vicente López, donde el principal referente votó con el kirchnerismo y rechazó presupuesto y fiscal; en San Isidro ni siquiera dejaron que se trate; en Junín y Pergamino aceptaron solo discutir autoridades y después frenaron todo; y en 9 de Julio directamente no hay diálogo. A eso sumale Arrecifes, donde el referente local termina encabezando marchas contra la inseguridad del propio municipio y nos defenestra en los medios”, afirmó a Infobae un armador provincial del PRO. En distritos como Pinamar y Zárate, el malestar también se hizo sentir.













