Escalopes de carne: el paso a paso para un plato clásico y versátil sin complicaciones

Con pocos pasos, es posible resolver un almuerzo con resultados sorprendentes para toda la familia. Los detalles.
Carne, escalope
Carne, escalope Foto: unsplash

Los escalopes de carne son un plato muy rico y se deshacen en el paladar. Su receta es realmente salvadora, ya que con pocos ingredientes y en pocos minutos, podés tener una preparación deliciosa y digna de enamorar. Pese a su sencillez, el resultado de gran sabor y textura lo convierte en uno de los favoritos de los mediodías.

Carne, escalope Foto: unsplash

La palabra “escalope” proviene del francés que hace referencia a un corte de carne delgado, ideal para empanar y freír. En Argentina, el escalope de carne se ha convertido en un clásico familiar, solicitado tanto en hogares como en bodegones porteños.

Paso a paso: cómo hacer escalopes de carne

Ingredientes:

  • 8 filetes finos de carne de res (puede ser nalga, cadera, o contra).
  • 2 huevos.
  • 1 taza de pan rallado.
  • ½ taza de harina de trigo.
  • 2 dientes de ajo (picados o machacados).
  • 2 cucharadas de perejil fresco picado (opcional).
  • Sal y pimienta al gusto.
  • Aceite.

Paso a paso:

Lo primero que tenés que hacer es conseguir bifes finos de carne vacuna, como de nalga, bola de lomo o cuadrada. Si están muy gruesos, podés ablandarlos un poco dándoles unos golpecitos con un martillo de cocina o algo similar. Después, salpimentalos de los dos lados.

En un bowl, batí los huevos junto con los dientes de ajo picados y, si te gusta, un poco de perejil picado. En otros platos poné harina por un lado y pan rallado por otro.

Ahora armá el empanado: pasá cada bife primero por la harina (sacale el excedente), después por el huevo batido, y por último por el pan rallado. Apretalos un poquito para que el pan rallado se adhiera bien.

Escalopes Foto: Freepik

Una vez que tengas todas las milanesas listas, poné a calentar aceite en una sartén grande a fuego medio-alto. Cuando esté bien caliente, freí las milanesas de a pocas, para que no se enfríe el aceite. Cocinalas unos 2 o 3 minutos por lado, hasta que estén bien doraditas y crocantes. Cuando las sacás, dejalas sobre papel absorbente para que larguen el exceso de aceite.

Servilas calentitas, acompañadas de papas fritas, puré, ensalada o lo que más te guste.