Masa sablée: la opción rápida y fácil para que tus tartas caseras sean suaves y se deshagan en la boca
De textura arenosa y preparación rápida, esta receta requiere un amasado mínimo pero efectivo. El paso a paso.

La masa sablée es una de las más elegidas para las tartas dulces y caseras, ya que son de textura suave, arenosa y sobre todo, muy fácil de comer. Puede usarse tanto en tartas de frutas, lemon pie, tartas de ricota o incluso, como base de la torta oreo. ¿Lo mejor? No necesita mucho amasado y se cocina rápido.
A diferencia de otras masas, la sablée requiere poco amasado, se hace rápido y su resultado final es tan delicado como delicioso. Con ingredientes simples y una técnica sencilla, podés lograr en casa una base de pastelería profesional, ideal para rellenar con lo que más te guste. Acá te contamos cómo prepararla paso a paso.

Paso a paso: cómo hacer masa sablée
Ingredientes (para una tartera de 24-26 cm)
- 200 g de harina 0000
- 100 g de manteca fría (en cubos)
- 80 g de azúcar impalpable
- 1 huevo
- 1 pizca de sal
- Esencia de vainilla (opcional)
- Ralladura de limón o naranja (opcional)
Paso a paso
En un bowl, colocar la harina y la manteca fría cortada en cubos. Con las manos o con un cornet, mezclar frotando hasta lograr una textura de arena gruesa. No hay que amasar, solo integrar sin calentar la manteca. Agregar el azúcar impalpable y la sal, y mezclar suavemente.
Incorporar el huevo (y esencia o ralladura si usás) y unir apenas la masa. No es necesario amasar: simplemente compactá hasta formar un bollo liso. Si está muy seca, podés agregar unas gotas de agua fría.
Llevar a la heladera envuelta en film durante al menos 30 minutos. Esto ayuda a que se relaje el gluten y sea más fácil de estirar.
Estirar sobre una superficie enharinada hasta un grosor de 3-4 mm y forrar la tartera. Pinchá la base con un tenedor.
Cocinar a blanco (sin relleno) si tu receta lo requiere: cubrí la masa con papel manteca y colocá porotos o peso de horneado. Horneá a 180 °C por 10-12 minutos. Luego, quitá el peso y cociná 5 minutos más hasta que apenas dore.
Si querés una masa aún más tierna, podés reemplazar el huevo por 2 yemas.
Para una versión sin azúcar, usá la misma receta y evitá el impalpable: es ideal para tartas saladas. Se puede freezar cruda ya estirada en la tartera o como bollo para usar cuando quieras.
Esta masa es una de las bases más versátiles y nobles de la pastelería. Con poco trabajo y muchos elogios garantizados, es perfecta para preparar una tarta casera que luzca como de panadería. Ideal para quienes buscan una opción rápida, fácil y deliciosa.

















