Aliado en la cocina: ¿por qué recomiendan cocinar el arroz con un poco de vinagre?

Aunque parezca un detalle sencillo, esta técnica aporta beneficios tanto en la textura como en la conservación del plato.
¿Por qué recomiendan cocinar el arroz con un poco de vinagre? Foto Unsplash
¿Por qué recomiendan cocinar el arroz con un poco de vinagre? Foto Unsplash

Cocinar arroz puede parecer sencillo, pero conseguir que quede delicioso no siempre es tan fácil como parece. Por eso, cada vez más personas recurren a un truco simple y eficaz: agregar un poco de vinagre al agua de cocción. Aunque parezca un detalle pequeño, esta técnica ofrece beneficios tanto en la preparación como en la conservación.

¿Qué aporta el vinagre al arroz?

El secreto está en el ácido acético, el componente principal del vinagre. Este ácido no solo aporta un sabor particular, sino que también influye en el almidón que el arroz libera mientras se cocina. Esto ayuda a evitar que los granos se peguen, logrando una textura más uniforme, suelta y esponjosa.

Arroz. Foto Unsplash
Arroz. Foto Unsplash

Además, al aumentar la acidez del agua, el vinagre contribuye a conservar mejor el arroz cocido, ideal para quienes preparan grandes cantidades y quieren guardarlo en la heladera para consumir después.

Diversos estudios, como los realizados en universidades reconocidas como Harvard, indican que el consumo moderado de vinagre, especialmente el de manzana, puede traer beneficios para la salud, tales como:

  • Mejorar la sensibilidad a la insulina.
  • Evitar picos bruscos de glucosa en sangre tras las comidas.
  • Prolongar la sensación de saciedad, lo que ayuda a controlar el apetito.
Arroz. Foto Unsplash
Arroz. Foto Unsplash

Cómo incorporar vinagre al cocinar arroz

Este método es sencillo y apenas modifica el sabor si se usa correctamente. Los pasos recomendados son:

  1. Lavar el arroz varias veces con agua para eliminar el exceso de almidón.
  2. Añadir entre 1 y 2 cucharaditas de vinagre de manzana o vinagre de arroz por cada taza de arroz crudo.
  3. Cocinar el arroz a fuego medio-bajo, con la olla tapada, hasta que el agua se absorba completamente.
  4. Dejar reposar el arroz de 5 a 10 minutos una vez cocido, para que los granos se asienten bien.
  5. Condimentar al gusto; la pequeña cantidad de vinagre no altera el sabor final.

El vinagre de manzana es el más usado, aunque también se puede optar por vinagre de arroz si está disponible. La clave está en usar una cantidad moderada para evitar que el arroz quede demasiado ácido.

Este truco tiene raíces en la cocina japonesa, donde el vinagre es un ingrediente clave para preparar arroz de sushi, ayudando a conservar su textura y sabor característicos.