Torta de nuez ideal: sin harinas y en pocos pasos para acompañar tus meriendas
Para acompañar tu infusión favorita te compartimos esta receta fácil, rica y saludable.
A la hora de pensar qué merendar y acompañar el mate, o cualquier infusión, las tortas y budines suelen ser la primera opción. Pero por su contenido calórico y la cantidad de harina que tiene, se les suele esquivar si estamos cuidándonos.
Pero ahora te presentamos la receta de una exquisita torta de nuez sin harinas. En solo unos pocos pasos la vas a poder disfrutar en alguna juntada.
Cómo hacer torta de nuez sin harinas
Ingredientes
- 4 huevos
- 2 manzanas grandes
- 1 cucharada del edulcorante líquido de tu preferencia
- 50 gramos de nueces
- 1 taza de coco rallado
- 1 cucharadita esencia de vainilla
- 1 cucharadita de polvo para hornear
Tarta de Nuez. Foto: captura YouTube
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Paso a paso
- Rallamos la manzana y la pasamos a un recipiente
- Incluir las nueces picadas, el polvo de horno, el coco, la vainilla y el edulcorante
- Integramos bien y sumamos uno a uno los huevos
- Incorporamos bien y pasamos a una sartén con tapa o a un molde de silicona para horno
- En ambos casos, cocinar a fuego medio por 25 a 30 minutos
- Dejar enfriar antes de desmoldar.
Riquísimo chipá sin harina
Ingredientes
- 2 huevos
- 100 g de queso rallado (puede ser parmesano, reggianito o el que más te guste)
- 1 taza y media de leche en polvo descremada
- 1 cucharadita de polvo de hornear
- Sal y pimienta a gusto
Chipá, comida. Foto: Freepik
El paso a paso
- En un bowl, batí ligeramente los huevos. Luego agregá el queso rallado y mezclá bien.
- Incorporá la leche en polvo, el polvo de hornear, la sal y la pimienta. Mezclá hasta que los ingredientes se integren y se forme una masa homogénea.
- Con las manos, armá bolitas del tamaño de una nuez y colocalas en una bandeja para horno previamente enmantecada o con papel manteca.
- Llevá a un horno precalentado a 200°C y cociná por aproximadamente 10 minutos, o hasta que los chipás estén doraditos por fuera.
- Dejá enfriar un poco y disfrutá. Se pueden comer tibios o fríos, pero recién horneados es la mejor manera de disfrutarlos.
