Final infartante en España: Barcelona le ganó el clásico al Real Madrid en la prórroga y se consagró campeón de la Copa del Rey

Barcelona vs Real Madrid, final de la Copa del Rey. Foto: Reuters/Marcelo Del Pozo

En un clásico infartante, Barcelona le ganó 3-2 al Real Madrid la final de la Copa del Rey y se consagró por 32 vez en la competencia. En los 120 minutos reglamentarios, los goles de la definición en el Estadio Olímpico de Sevilla los marcaron Pedri, Kylian Mbappé, Aurélien Tchouaméni, Ferrán Torres y Jules Koundé.

El conjunto "blaugrana" abrió el marcador en el minuto 28, con un disparo al ángulo de Pedri desde afuera del área, marcando el dominio que llevaban los de Hansi Flick en el primer tiempo.

Pedri marcó el primero; Barcelona vs Real Madrid, final de la Copa del Rey. Foto: EFE/Julio Muñoz

El conjunto blanco pudo empatar en el minuto 35 en el que fue su primer disparo a puerta, pero finalmente el tanto de Jude Bellingham fue anulado por fuera de juego.

Ya en el segundo tiempo, el Madrid dispuso de su poderío ofensivo y encontró el empate a los 70', gracias a un tiro libre de Kylian Mbappé que dejó sin chances al arquero polaco Wojciech Szczesny.

Siete minutos después, Aurélien Tchouaméni cabeceó un centro preciso de Arda Güler desde el córner y dio vuelta el clásico para los de Carlo Ancelotti, desatando la euforia blanca en el estadio sevillano.

Kylian Mbappé y Aurélien Tchouaméni; Barcelona vs Real Madrid, final de la Copa del Rey. Foto: Reuters/Borja Suarez

Cuando todo parecía que el Real Madrid saldría victorioso, apareció Ferrán Torres para aprovechar una mala salida de Thibaut Courtois, marcar el 2-2 y forzar el tiempo extra en una final de la Copa del Rey que pudo cambiar por completo en el minuto 96 en un penal que señaló en primera instancia Ricardo de Burgos Bengoechea, de Raúl Asencio sobre Raphinha, y del que se retractó tras verlo en el VAR.

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Barcelona lo ganó en la prórroga

Pese a que las llegadas no faltaron, ninguno de los dos sacó ventaja en el primer tiempo de la prórroga y parecía que todo se definía en los penales, pero Jules Koundé apareció a los 116 minutos para marcar el 3-2 y hacer estallar de alegría a los hinchas del Barcelona.