No solo los osos hibernan: te mostramos qué otros animales atraviesan el estado de letargo

Murciélagos, coronavirus

La hibernación se trata de un estado de somnolencia profunda y prolongada en el que algunos animales se sumergen durante los meses de invierno. Durante esta estación, el metabolismo decrece hasta un nivel muy bajo, además de tener una temperatura corporal y una frecuencia respiratoria inferiores a lo normal.

Este estado -también conocido como proceso de letargo invernal- abarca a distintos tipos de especies, las cuales atraviesan esta época con temperaturas corporales con grados centígrados cerca de la congelación.

Además, cuando los animales disminuyen su temperatura pueden parecer muertos ya que su pelaje permanece helado al tacto. Durante este trascurso de tiempo, su metabolismo es tan bajo que no gastan energías y utilizan las reservas de grasas y alimentos que previamente prepararon para esa época.

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Murciélago

Murciélago. Foto: Unsplash.

Los murciélagos son el único grupo de mamíferos pequeños que tiene una gran longevidad y pueden llegar a vivir hasta 30 años. Esto es posible gracias a la hibernación porque les permite restringir el gasto diario de energía a lo largo de su vida y vivir más tiempo.

La diferencia con los demás animales es que no disminuyen su temperatura durante la hibernación, ya que tienen tasas metabólicas muy altas, por lo que intentan preservar el calor lo máximo posible.

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Marmota alpina 

Marmota. Unsplash.

Las marmotas alpinas se alimentan lo máximo posible durante toda la primavera y el verano como preparación para la época de hibernación. Lo hacen en sus madrigueras que son subterráneas y transmitidas de generación en generación.

Cuando llega el momento de iniciar con el letargo invernal, en octubre, ya que se encuentran en el hemisferio norte, cierran la puerta con heno y pasto.

Durante ese período, menciona la Universidad de Michigan, su temperatura baja de 33° Celsius a -15° C, mientras que su respiración se ralentiza a entre 2 y 3 respiraciones por minuto. La termorregulación favorece a los adultos ya que les permite conservar energía.

Una vez cada 10 días se despiertan por un lapso de tiempo. Esto permite que aumenten su temperatura y no se congelen.

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Ardilla terrestre

Ardilla.

Ellas pasan gran parte del tiempo dentro de sus madrigueras subterráneas para defenderse de sus depredadores. Al igual que los animales mencionados anteriormente, utilizan el letargo para poder conservar energía durante lo que queda del año. Su hibernación dura aproximadamente 6 meses.

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Oso pardo

Oso Pardo de España. Foto: Unsplash

Estos mamíferos tienen un período de inactividad desde octubre hasta diciembre, época en la que entran en un sueño en el que su temperatura corporal baja. Sin embargo, no es una hibernación real ya que pueden despertarse fácilmente del sueño. También, durante este período agudiza aún más sus sentidos de olfato y audición.

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Tortuga Boba

Tortuga Boba. Unsplash.

Este animal está presente en todos los océanos del mundo, así como también en los mares. Es un animal solitario y migratorio que utiliza las corrientes marinas para desplazarse. 

Lo más sorprendente es que realiza la hibernación en aguas profundas, donde puede estar semanas sin salir a respirar a la superficie.